¿Qué pasará con el suero de leche?

Realidad. Según los productores los controles fueron escasos. (Foto archivo)
Realidad. Según los productores los controles fueron escasos. (Foto archivo)

Después de seis meses de estar prohibida la venta de suero de leche con fines industriales para acabar con la informalidad y promover el consumo de leche, la moratoria está por terminar el 25 de este mes con varias dudas de quienes se dedican a la producción de suero.

Con la moratoria quedaron autorizados para el autoconsumo aquellas industrias que generaban su propio suero de leche y producen bebida láctea, y el suero que se use para alimentación animal, debía estar tinturado.

Sin embargo para muchos productores de leche quesos y bebidas lácteas esto no se ha cumplido y la moratoria únicamente ha perjudicado a lecheros y queseros, siendo beneficiadas únicamente las grandes empresas que no han dejado de consumir el suero.

Eduardo Cobo, pequeño industrial de quesos y bebidas lácteas en Cotopaxi, dijo que el Ecuador es el único país que esta botando un producto rico en proteína y con todos sus nutrientes como es el suero, “esperamos que la preocupación no trascienda porque se esta cometido un grave error y los productos lácteos deben ser transparentados para su consumo”.

Destacó que el suero no debería ser tan satanizado y podría ser vendido como bebida si el país proporcionará la debida industrialización y apoyo al sector para convertirlo en bebidas de suero perfectamente etiquetadas y que aportan con proteínas.

Cobo destacó que durante estos meses no han existido controles e incluso muchas industrias han comprado suero que no cumple con las buenas practicas de manifactura, perjudicando a quienes sí cumplen con todos los reglamentos y tampoco ha ayudado a los ganaderos que siguen en la misma situación.

“Las reglas no están claras esperamos que se dé más control y que se hable de los beneficios de cada producto porque se ha creído que el suero es solo para los animales o es un veneno”. Destacó que se debe dar uso al suero porque actualmente prohíben la venta, no se puede devolver y también esta prohibido botarlo porque es un contaminante.

Jorge Novillo, presidente de la Asociación de Pequeños Productores de Quesos de Cotopaxi, comento que han sido meses duros para todos, ya que con lo que compran de leche solo el 10% se cuaja y se convierte en queso, mientras que el 90% se convierte en suero. Es decir, pierden la mayoría del producto y en ocasiones tienen que vender el suero a muy bajo precio a ganaderos para que lo consuman los animales.

Antes de la moratoria el suero era comercializado con industrias de la provincia y según Novillo de alguna manera esto ayudaba para solventar los gastos “ahora de las 18 personas que son de la asociación producen de 15 a 20 mil litros diarios de suero que antes se vendía a distintas empresas y ahora se queda dañándose o se vende casi a precio de regalo”.

Para Novillo las cosas siguen iguales o peores ya que no hay una respuesta para el suero, “yo creo que las cosas están como siempre no quiere decir que hemos comprado más leche ni más suero, sino que se están quitando las opciones de trabajo para mucha gente”. (NA)