El comercio de canastos aún tiene necesidades

Opciones. Varios comercios aún están en los alrededores de la vía.
Opciones. Varios comercios aún están en los alrededores de la vía.

A pesar de las campañas para mejorar la venta este sector aún tiene problemas.

Los canastos hechos de totora que se comercializan en el sector El Niágara son parte de la identidad de Latacunga pues por años estos productos han sido llevados a distintos puntos del país, sin embargo, en los últimos años los comerciantes han notado que sus ventas no son las mismas por distintos factores.

Una de las principales problemáticas según Gladys Charco, comerciante es la falta de promoción que existe, “desde que nos ubicaron en esta plaza nunca se nos ha colocado un letrero o señalética previa para que los visitantes sepan que la feria está en este lugar”.

Destacó que no todos los comerciantes se ubican en este espacio y esto hace que se vea vacío, “antes había más personas pero por la poca afluencia de visitantes ya no se ubican en este lugar y siguen en los alrededores como se hacía antiguamente”, acotó Charco.

Por su parte Julián Robles, comerciante dijo que otra necesidad que tienen en este lugar son los parqueaderos ya que están mal ubicados y los turistas sufren el riesgo de chocarse cuando quieren ingresar a la plaza desde el norte al sur o del sur al norte, “no hay señalética, hay obstrucciones en la vía y el ingreso es muy confuso”.

Los próximos meses son los que tienen mejores ventas ya que se compran canastos para la Mama Negra, y la Navidad, sin embargo en esta última fecha el producto ha sido reemplazado por cajas de cartón o contenedores de plástico, “antes los supermercados se llevaban muchas canastas de aquí ahora ya se llevan solo la mitad”, acotó Robles

Sin embargo, con la campaña ‘Latacunga renace limpia’, que desarrolla la Empresa de Aseo y Gestión Ambiental de Latacunga (Epagal) que consiste en cambiar el uso de fundas plásticas por canastos en los mercados de la ciudad, se ha conseguido que este producto salga más a la venta y puedan conseguir más ganancias.

Para que los ciudadanos puedan acceder a un canasto deben entregar a cambio botellas plásticas en los puntos donde se ubica Epagal. Desde que inició la campaña hasta la actualidad existe un número alto de botellas recicladas las mismas que serán vendidas y con esto se obtiene el dinero para pagar las canastas la precio justo.

“Un canasto grande puede costar entre un dólar y un dólar 50 pero esto dura para toda la vida, es resistente al agua, a las caídas y puede soportar mucho peso”, recordó Robles, e invitó a la ciudadanía a consumir este productos hecho por manos de cotopaxenses. (NA)