La Terminal terrestre de Latacunga vuelve a la normalidad

cambios. Los comerciantes retomaron sus actividades en la terminal.
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Desde el inicio de esta semana los pasillos, andenes y locales de la terminal terrestre de Latacunga volvieron a tener movimiento, pues en los últimos días sus puertas permanecieron cerradas debido a las movilizaciones, al paro de transportistas y al cierre de carreteras, lo que afecto no solo a los choferes y pasajeros sino también a los propietarios ya arrendatarios de locales comerciales.

“Es una pérdida de casi 200 dólares porque no vendimos ni un centavo en esos días en los que solo hubo gasto y preocupación”, acotó María Guevara, arrendataria de un local de confites y bebidas.

María destacó que desde que inició el paro ya no pudieron ingresar a la terminal pues las puertas permanecían cerradas, “este es mi único ingreso y me afectó mucho el no poder venir a trabajar”.

En el caso de Paulina Quishpe, comerciante de habas y papas fritas las perdidas de estos días no se van a reparar ni en dos meses, “un solo día que no se tenga ganancia es no comer ni pagar deudas, pero si son 11 días, así como se afecta a las grandes empresas también a los pequeños comerciantes”.
Los transportistas también aseguran que existieron pérdidas de cientos de dólares que a fin de mes no podrán recibir, “nosotros nos debemos a nuestros dirigentes y debíamos permanecer paralizados, sin embargo, el Gobierno fue el que no dio una pronta solución y por esto no podíamos dar el servicio”, dijo Marlon Tovar transportista.

Tovar agregó que el pasaje no tiene incremento a ningún destino y desde el lunes trabajan con regularidad, “hemos visto un movimiento regular”.

Cristina Campos, pasajera, destacó que a diario debe tomar un bus al sur de Quito, pues vive allá pero trabaja en Latacunga, “durante los primeros días de movilización pude llegar en carros privados que me cobraban hasta los cierres viales y caminaba varios tramos, pero la última semana ya no pude llegar y debí excusarme en mi empleo, donde afortunadamente supieron entender”. (NA)

Desde el inicio de esta semana los pasillos, andenes y locales de la terminal terrestre de Latacunga volvieron a tener movimiento, pues en los últimos días sus puertas permanecieron cerradas debido a las movilizaciones, al paro de transportistas y al cierre de carreteras, lo que afecto no solo a los choferes y pasajeros sino también a los propietarios ya arrendatarios de locales comerciales.

“Es una pérdida de casi 200 dólares porque no vendimos ni un centavo en esos días en los que solo hubo gasto y preocupación”, acotó María Guevara, arrendataria de un local de confites y bebidas.

María destacó que desde que inició el paro ya no pudieron ingresar a la terminal pues las puertas permanecían cerradas, “este es mi único ingreso y me afectó mucho el no poder venir a trabajar”.

En el caso de Paulina Quishpe, comerciante de habas y papas fritas las perdidas de estos días no se van a reparar ni en dos meses, “un solo día que no se tenga ganancia es no comer ni pagar deudas, pero si son 11 días, así como se afecta a las grandes empresas también a los pequeños comerciantes”.
Los transportistas también aseguran que existieron pérdidas de cientos de dólares que a fin de mes no podrán recibir, “nosotros nos debemos a nuestros dirigentes y debíamos permanecer paralizados, sin embargo, el Gobierno fue el que no dio una pronta solución y por esto no podíamos dar el servicio”, dijo Marlon Tovar transportista.

Tovar agregó que el pasaje no tiene incremento a ningún destino y desde el lunes trabajan con regularidad, “hemos visto un movimiento regular”.

Cristina Campos, pasajera, destacó que a diario debe tomar un bus al sur de Quito, pues vive allá pero trabaja en Latacunga, “durante los primeros días de movilización pude llegar en carros privados que me cobraban hasta los cierres viales y caminaba varios tramos, pero la última semana ya no pude llegar y debí excusarme en mi empleo, donde afortunadamente supieron entender”. (NA)

Desde el inicio de esta semana los pasillos, andenes y locales de la terminal terrestre de Latacunga volvieron a tener movimiento, pues en los últimos días sus puertas permanecieron cerradas debido a las movilizaciones, al paro de transportistas y al cierre de carreteras, lo que afecto no solo a los choferes y pasajeros sino también a los propietarios ya arrendatarios de locales comerciales.

“Es una pérdida de casi 200 dólares porque no vendimos ni un centavo en esos días en los que solo hubo gasto y preocupación”, acotó María Guevara, arrendataria de un local de confites y bebidas.

María destacó que desde que inició el paro ya no pudieron ingresar a la terminal pues las puertas permanecían cerradas, “este es mi único ingreso y me afectó mucho el no poder venir a trabajar”.

En el caso de Paulina Quishpe, comerciante de habas y papas fritas las perdidas de estos días no se van a reparar ni en dos meses, “un solo día que no se tenga ganancia es no comer ni pagar deudas, pero si son 11 días, así como se afecta a las grandes empresas también a los pequeños comerciantes”.
Los transportistas también aseguran que existieron pérdidas de cientos de dólares que a fin de mes no podrán recibir, “nosotros nos debemos a nuestros dirigentes y debíamos permanecer paralizados, sin embargo, el Gobierno fue el que no dio una pronta solución y por esto no podíamos dar el servicio”, dijo Marlon Tovar transportista.

Tovar agregó que el pasaje no tiene incremento a ningún destino y desde el lunes trabajan con regularidad, “hemos visto un movimiento regular”.

Cristina Campos, pasajera, destacó que a diario debe tomar un bus al sur de Quito, pues vive allá pero trabaja en Latacunga, “durante los primeros días de movilización pude llegar en carros privados que me cobraban hasta los cierres viales y caminaba varios tramos, pero la última semana ya no pude llegar y debí excusarme en mi empleo, donde afortunadamente supieron entender”. (NA)

Desde el inicio de esta semana los pasillos, andenes y locales de la terminal terrestre de Latacunga volvieron a tener movimiento, pues en los últimos días sus puertas permanecieron cerradas debido a las movilizaciones, al paro de transportistas y al cierre de carreteras, lo que afecto no solo a los choferes y pasajeros sino también a los propietarios ya arrendatarios de locales comerciales.

“Es una pérdida de casi 200 dólares porque no vendimos ni un centavo en esos días en los que solo hubo gasto y preocupación”, acotó María Guevara, arrendataria de un local de confites y bebidas.

María destacó que desde que inició el paro ya no pudieron ingresar a la terminal pues las puertas permanecían cerradas, “este es mi único ingreso y me afectó mucho el no poder venir a trabajar”.

En el caso de Paulina Quishpe, comerciante de habas y papas fritas las perdidas de estos días no se van a reparar ni en dos meses, “un solo día que no se tenga ganancia es no comer ni pagar deudas, pero si son 11 días, así como se afecta a las grandes empresas también a los pequeños comerciantes”.
Los transportistas también aseguran que existieron pérdidas de cientos de dólares que a fin de mes no podrán recibir, “nosotros nos debemos a nuestros dirigentes y debíamos permanecer paralizados, sin embargo, el Gobierno fue el que no dio una pronta solución y por esto no podíamos dar el servicio”, dijo Marlon Tovar transportista.

Tovar agregó que el pasaje no tiene incremento a ningún destino y desde el lunes trabajan con regularidad, “hemos visto un movimiento regular”.

Cristina Campos, pasajera, destacó que a diario debe tomar un bus al sur de Quito, pues vive allá pero trabaja en Latacunga, “durante los primeros días de movilización pude llegar en carros privados que me cobraban hasta los cierres viales y caminaba varios tramos, pero la última semana ya no pude llegar y debí excusarme en mi empleo, donde afortunadamente supieron entender”. (NA)