Édison Antonio Vera Hidalgo, de 57 años, quien se ganaba la vida vendiendo panes de yuca en el mini terminal terrestre de La Concordia, murió en una clínica de Santo Domingo, horas después de caerse de un bus interprovincial, automotor que le pasó una de sus llantas delanteras por su cuerpo, fracturándole la pelvis y la pierna izquierda.
Según Jonathan Vera, hijo mayor de la víctima, su papá la mañana del último jueves se subió a vender los panes en el micro, pero cuando se iba a bajar con el bus en movimiento se enredó en el estribo y cayó pesadamente a vía y una de las llantas del automotor le pasó por parte de su cuerpo.
“Mi papá fue trasladado en ambulancia a una clínica de Santo Domingo donde murió la noche del jueves, al parecer no soportó las heridas y además como era hipertenso se infartó; él era el único sostén de mis dos hermanas menores de edad y además de dos niñas más, hijas de su compromiso actual”, relató el atribulado hijo.
Necesitan ayuda
Agregó que los directivos de la cooperativa de transporte a la que pertenece el bus causante de la tragedia, se acercaron a dialogar con él, pero hasta el momento no concretan la ayuda.
“Mi padre era quien mantenía el hogar donde hay cuatro menores de edad, espero que el propietario del bus y los dirigentes nos brinden la ayuda necesaria, es un ser humano el muerto”, expresó Jonathan Vera.
El cuerpo sin vida del vendedor de panes de yuca fue retirado por sus familiares la tarde del viernes, desde el centro de Investigaciones de Ciencias Forenses de Santo Domingo y trasladado a su domicilio en el barrio San Pablo 2, sector 4 de la cooperativa de vivienda Nueva Concordia, donde fue velado.
El bus de la cooperativa Quinindé, disco número 19 involucrado en el percance, fue retenido por agentes policiales, mientras que el conductor se dio a la fuga en medio de la confusión. (JAR)
PARA SABER
El sepelio de Édison Antonio Vera Hidalgo se realizará hoy domingo en el cementerio general de La Concordia.