Los Mustang dijeron que no a las drogas y ahora son ejemplo

INTEGRACIÓN. Quienes son parte del grupo Mustang se caracterizan por utilizar un pañuelo rojo con pintas blancas sobre su cabeza.
INTEGRACIÓN. Quienes son parte del grupo Mustang se caracterizan por utilizar un pañuelo rojo con pintas blancas sobre su cabeza.

Entre los mayores logros laborales está el árbol de Navidad más grande de Esmeraldas. También sueldan bajo el agua.

Nunca dejaron de creen en ellos. Tocaron algunas puertas institucionales y no todas se abrieron, pero insistieron. Para lograr ‘identidad’ se colocaron un pañuelo rojo con puntos blancos sobre la cabeza y a todos le dicen con orgullo que son los soldadores Mustang.

Ya son siete años en la lucha. Siete años demostrando que robar, fumar, drogarse o pelear con facilidad, solo es parte del pasado. Pero ahora juran que se comportarán bien, que desean una nueva oportunidad. Y los hechos certifican el juramento.

Washington Alcívar, el mentalizador de Mustang les creyó y los hizo una familia. Juntos empezaron a soldar puertas y ventanas hasta que, hace 5 años, llegó la gran oportunidad de arreglar el puente peatonal de la Tolita 1, sur de la ciudad de Esmeraldas.

Cambios de vida

El año anterior el Municipio de Esmeraldas los volvió a desafiar. Les pidió hacer el árbol navideño más grande la ciudad. Cumplieron la meta y se convirtieron, una vez más, en el orgullo de sus familias y gran parte de la sociedad.

Jordan Moreira Márquez está entre los que hicieron posible el árbol de 18 metros. Él no estuvo relacionado con el vicio de las drogas, pero su amor por la mecánica industrial y sus derivados, lo tiene desde hace siete años practicando, ganando dinero y ahora devolviendo lo aprendido a la nueva camada.

Su mayor reto laboral ocurrió hace un año bajo el agua de mar. Le tocó soldar una tubería. Ese fue el momento para demostrar que su certificado de buzo y su experiencia como soldador de tubería y tanques de petróleo, estaban acorde a la situación.

“He visto y convivido cómo algunos compañeros que tenían problemas de conductas o consumo de drogas, ahora son profesionales, responsables y ya no están en el vicio”, destaca. Y aclara que el proyecto es incluyente.

Seguir en la Universidad

Romel Ayoví Menéndez, al obtener el título de Bachiller postuló para ingresar a la Universidad, pero no logró el puntaje para ser Ingeniero Industrial. Como alternativa se inscribió en el curso Mustang y ahora está familiarizado con temas mecánicos.

“Antes de empezar una jornada de trabajo o práctica, recibimos una charla de motivación y oramos”, detalla parte del día a día que se desarrolla en las instalaciones adyacentes a la Federación Deportiva de Esmeraldas; en ‘El huequito’, donde está la sede de los Mustang, el grupo de soldadores esmeraldeños que optaron por el trabajo y no el vicio.