Proyectos y vulnerabilidades deben ser abordados

GRUPO. El proceso de rehabilitación demanda la creación de proyectos que impulsen a los pacientes a continuar luego de salir del internamiento.
GRUPO. El proceso de rehabilitación demanda la creación de proyectos que impulsen a los pacientes a continuar luego de salir del internamiento.

De los 33 años cumplidos el pasado enero, 22 de ellos fueron empleados en el consumo de las drogas. Hoy, su mirada es diferente, su voz transmite seguridad, pero sobretodo, su pensamiento cambió significativamente. ‘Fernando’, quien cumple un proceso de desintoxicación y de rehabilitación en el Centro Católico ‘Santa Cruz’ terapia para alcohólicos y drogadictos, en la ciudad de Esmeraldas, atraviesa cinco meses de un programa de seis, por lo que pronto saldrá hacia una sociedad que en muchas ocasiones niega oportunidades.

Reunidos en el habitual grupo de apoyo, comienzan a exponer sobre las diferentes metas que desean alcanzar. Estudiar, trabajar o simplemente caminar libres por las vías y no ser estigmatizados, son los anhelos de 10 hombres ingresados en este centro privado. Ramón Arroyo, tecnólogo en consejería por drogodependencia y coordinador del establecimiento, revela que la recuperación de los pacientes recae en la formulación de tres proyectos.

Cambio de actitud

Criar cerdos y pollos, panadería y preparar leche de soya, los capacita en el manejo de su adicción, pero también los involucra en un ambiente laboral futuro. Aquello, sumado a la unión familiar que se detalla desde el primer momento de ingreso a la unidad, cumplen dos de los cuatros factores, que implican una rehabilitación integral, precisa Arroyo.

“A futuro quiero reponer algo de lo que hice, cuando salga de aquí, pienso comprar pollos y criarlos, para ver el esfuerzo de lo que destruí y de lo que construyo yo mismo”, menciona ‘Fernando’, quien un día, llegó a vender las aves de su mamá, por menos de dos dólares cada uno para financiar su consumo.

El psicólogo clínico Stalin Garrido, del Distrito de Salud 08D01, asegura que dos de cada 10 pacientes que ingresan a tratamiento podrán recuperarse, y uno de los dos, tiende a recaer.

Proceso

Sin apoyo regresan al consumo

‘Rodrigo’, luego de cumplir su rehabilitación al consumo de drogas atravesó ese duro momento, una vez recuperado llegó al seno familiar, luego de dos semanas sin encontrar una fuente para sustentar sus gastos, los reclamos de sus seres queridos llegaron.

Aquello lo llevó nuevamente al consumo, que ahora lo mantiene a raya luego de los consejos impartidos en uno de los cuatro centros ambulatorios dentro de Esmeraldas, que lo conforman los dos Tipo ‘C’ de San Rafael y Las Palmas, y los dos centros de Salud Tipo ‘B’ Nº 1 y Nº 2 del Distrito 08D01.

Dedicación

Rehabilitación dirigida a presos

El 30 de enero pasado, se implementó el servicio Ambulatorio Intensivo, en el Centro de Rehabilitación Social de Esmeraldas. El programa que forma parte del trabajo conjunto entre el Ministerio de Salud Pública y el Ministerio de Justicia, Derechos Humanos y Cultos, acoge por el momento a 40 presos que cumplirán un período inicial de seis meses, para concluir con el intensivo de un año.

Su director, Abdón Villarreal, cuenta que los internos realizaron una evaluación previa, donde el apoyo familiar fue fundamental. “Ellos al salir se enfrentan al rechazo social y a la falta de empleo, por ello, aquí dentro su autoestima es analizada y tratada, en cuanto a lo demás, se los capacita en diferentes actividades, en las que pueden formar un micro emprendimiento”, explicó.

Formación

Estudiar es la clave

El Ministerio de Educación, aborda el asunto de los jóvenes en vulnerabilidades destacando dos frentes, uno de ellos, recae en las cifras otorgadas por el Ministerio de Salud, en el que se han capacitado a nivel nacional a 3.450 profesionales de los Departamentos de Consejería Estudiantil (DECE) sobre situaciones asociadas a drogas.

Aquel trabajo se lo realiza desde que un estudiante es detectado con problemas de consumo y se lo aborda junto a los padres de familia, profesionales y la institución educativa, para que no deserte de los estudios.

En el segundo frente, está el programa ABC, sin límites de edad y con el requisito de no haber estudiado por lo menos tres años desde que abandonara las aulas. Cristian Molina, director Distrital de Educación de Esmeraldas, precisó que 1.228 personas se graduaron como bachilleres en el 2018, como parte de este proyecto. También se pueden acoger a la Alfabetización, Post Alfabetización y al Bachillerato Virtual, modalidades empleadas para el beneficio de la población con mayor grado de vulnerabilidad.