La Policía Nacional revela que los hechos violentos se están generando en zonas rurales donde es difícil controlar.
Las investigaciones de la Policía Nacional establecen que, en la provincia de Esmeraldas las personas persisten en sus actuaciones equivocadas en arreglar sus problemas personales a través de la violencia y no hacerlo bajo los parámetros judiciales pertinentes que establecen las leyes y la Constitución.
Este mal comportamiento está generando hechos violentos que terminan en muertes. A la fecha, son 28 las personas asesinadas a tiros, puñaladas, machetazos y otros tipos de violencia. En comparación a 2018 que en los cinco primeros meses se registraron 32 asesinatos, de los 72 que se suscitaron en todo el año.
El jefe de la Policía en Esmeraldas, Alaín Luna Villavicencio, dijo que con las estadísticas actuales esta provincia está en ‘verde’, con tendencia a la baja, pues, se trabaja para evitar que los niveles de violencia aumenten.
Campaña en valores
Explicó que, como institución de control de seguridad ciudadana, mantienen una campaña en valores que se realiza en los establecimientos educativos, en barrios y comunidades con personal del Grupo Lúdico y la Policía Comunitaria, pero es un trabajo a largo plazo.
“Esta campaña necesita del apoyo de las instituciones en el campo social, trabajo, educación y factibilidad para que las personas tengan otro tipo de forma de vida y no generen violencia”, afirma Luna Villavicencio.
Otra de la situación que revelan las investigaciones de la Policía Nacional, es que, de las 28 muertes violentas registradas de enero a mayo de este año, 17 se han registrado en zonas rurales de la provincia de Esmeraldas.
Difícil acceso
Por la ubicación geográfica de los poblados, son de difícil acceso y control para la Policía, por en eso en muchos de los casos, únicamente los uniformados ingresan para realizar los levantamientos de cadáver y las pericias que permitan identificar y localizar al agresor, para ponerlo a órdenes de las autoridades judiciales.
Son 11 los asesinatos que se han producido este año en zonas urbanas de los siete cantones de la provincia de Esmeraldas. De los 28 asesinatos, 14 están resueltos, 10 en investigación, dos con boletas para los criminales y de dos se tiene información que está siendo procesada para la judicialización.
De los siete cantones de la provincia, en Esmeraldas han ocurrido nueve muertes violentas; ocho en San Lorenzo; tres en Quinindé y Eloy Alfaro; cuatro en Atacames, y una en el cantón Rioverde.
27 hombres
Según las investigaciones policiales, 27 víctimas son hombres y una mujer. Se determinó que el tipo de delito son 24 asesinatos y cuatro homicidios. En 14 casos se utilizaron armas de fuego, en 11 armas blancas (chuchillos y machetes) y en tres casos objetos contundentes, como maderos y otros.
Las causas que conllevaron a los hechos violentos fueron 19 casos por violencia interpersonal, que tuvieron como motivaciones el odio, maltrato, riñas y litigio de bienes. Ocho asesinatos se dieron por violencia criminal, provocadas por venganzas, evasión de la justicia, robos a personas, entidad financiera y a domicilio.
Homicidio y asesinato
El homicidio consiste en matar a una persona incurriendo en ciertas circunstancias específicas, tales como la alevosía, el precio, la recompensa, la promesa, el ensañamiento o la premeditación, aumentando deliberada e inhumanamente el dolor del ofendido.
Se considera asesinato cuando una persona causa la muerte de otra y lo lleva a cabo con alguno de los tres supuestos (o los tres juntos) de ‘alevosía’ (se realiza a traición y/o cuando se sabe que la víctima no va a poder defenderse), ‘ensañamiento’ (aumentando deliberada e inhumanamente el sufrimiento de la víctima) o ‘concurrencia de precio’ (cometiendo el crimen a cambio de una retribución económica o material).
CIFRAS
64
PERSONAS
fueron asesinadas en el 2016 en la provincia de Esmeraldas.
72
MUERTES
violentas se registraron en año 2018.
28
ASESINATOS
se han registrado de enero a mayo de 2019.
PARA SABER
La pena máxima por asesinato son 34 años y ocho meses de cárcel. En Esmeraldas, ya se han establecido varias sentencias.
“Debemos cambiar la forma de actuar y proceder del niño y el joven, para que no aprendan y se contagien de lo malo que está haciendo el adulto. Para que no piensen que es habitual resolver sus problemas a través del uso de la fuerza”.
Alaín Luna Villavicencio.
Jefe de la Policía en Esmeraldas.