Una larga y dolorosa travesía

MA. ALEJANDRA SALAZAR MURRIETA

Presos de un profundo dolor abdominal, vómitos, espasmos y lamentos, sumados a la sudoración y la taquicardia que nos anunciaba un inminente infarto, nos hacen decidirnos ir al centro médico más cercano, porque, a pesar de la asistencia de acuerdo con las instrucciones dadas por el médico, el cuadro clínico nos hace suponer lo peor.

Fue así que los acomodamos con el mayor de los cuidados, pues, en sus ojos se dibujaba un gran dolor, arropados con una colchita para trasmitirles calor, emprendimos el trayecto a la clínica donde ellos tendrían inmediata atención.

En cada uno de sus lamentos, en cada grito de dolor, intentamos trasmitirles seguridad y positivismo, mensajes que también fueron para nosotros, porque teníamos que creernos que dentro de poco tiempo todo estaría bien.

La fila de carros era interminable, los buses que se adueñan de la calle, el que gira de improviso sin hacer uso de la direccional, el que va en junta de negocios asistido por su celular y no le atina a conducir y hablar al mismo tiempo; nos toca sortear también a las carretas que se cruzan sin cuidado, al de la moto que esquiva los autos con un zigzagueo propio de un reptil y a la oficinista que se maquilla en cada semáforo.

Los minutos pasan y la vida pende de un hilo, de la suerte, del semáforo, del conductor, de la gracia, del destino. Acortar esa distancia es al momento lo único que separa la vida de la muerte. Otro grito de dolor nos sobrecoge, nadie dice nada, pues, en nuestra mente la idea es la misma, el tiempo es nuestro enemigo y es difícil acortarlo, debido a que no depende de nosotros.

Luego de una angustiosa travesía llegamos por fin a nuestro destino, la distancia es terrible, es mortal. Nuestros pacientes son ingresados y atendidos. Y allí pensamos, ¿qué pasaría si en lugar de un gatito, el herido es un niño, una mujer en labor de parto, un hombre atropellado? ¿Serán capaces de sobrevivir luego de tener que cruzar toda la ciudad para ser atendidos?

[email protected]