Veinticinco estudiantes de distintas carreras y niveles de estudio de la Pontificia Universidad Católica de Esmeraldas (Pucese), desde ayer son parte de un emprendimiento al interior del campus, que les permitirá, a la par, educarse y trabajar.
Ellos ahora son los administradores del bar local ‘La sazón de la Pucese’, quienes se organizan para turnarse y no descuidar sus horarios de clases, ni la atención de este negocio, que les generará recursos; y que estará abierto de lunes a domingo.
Aitor Urbina, pro-rector de la Pucese, manifestó que esto nació desde el departamento de Bienestar Universitario, quienes conjuntamente con Trabajo Social, se identificó quienes tenían dificultades económicas para cubrir sus estudios y tenían la predisposición para entrar al proyecto.
Vinculación universitaria
Gabriela Preciado, de noveno nivel de Enfermería, comentó lo motivada que está con este proyecto, por ello, se organizó desde muy temprano para enviar a sus tres hijos a la escuela y colegio y llegar temprano al campus, para a las 08:00 iniciar la atención junto con sus otros compañeros.
Su horario laboral será hasta las 13:00, porque a partir de las 14:00 tiene que asistir a clases, y así todos han planificado sus tiempos, esperando que la comunidad educativa les apoye en este espacio que les permitirá mantenerse en su formación académica.
Para Álex Carvajal, de cuarto semestre de Educación Básica, esta es una gran oportunidad que se les brinda para terminar sus estudios y, sobre todo porque tendrán un ingreso económico.
La estudiante del quinto nivel de Enfermería, Pamela Borbor, manifestó que es esencial que la universidad haya tenido esta iniciativa, porque es una verdadera vinculación con lo laboral y mucho más con la universidad.
Capacitación previa
El docente, Freddy Betancur, responsable de la capacitación, dio a conocer que de acuerdo a la planificación, se les brindo una instrucción de 20 horas, sobre servicio y atención al cliente; y normas de higiene, antes, durante y después de los expendios de los desayunos, almuerzo y meriendas.
Génova Zambrano, orientadora de la Pucese, explicó que hace un mes, el sacerdote Johnny, responsable del departamento de Bienestar Estudiantil, lideró el proceso y gestionó el financiamiento que salió de la misma universidad, el que también cubre los uniformes. Además se incluyó capacitaciones en lenguaje corporal, relaciones personales, comunicación.
VOCES
“Como madre de familia, este trabajo será un apoyo económico para mi familia y para avanzar y muy pronto culminar mis estudios”
Pamela Borbor,
Estudiante de quinto nivel de Enfermería.
“Esto nos motiva a continuar estudiando y sobre todo será un referente para otros alumnos que a futuro también puedan participar”
Alex Carvajal,
Cuarto semestre de Educación Básica.
“Nos organizamos, porque unos cocinamos, otros atienden con precio módicos acorde al bolsillo de la comunidad educativa”
Gabriela Preciado,
Noveno nivel de Enfermería.
Veinticinco estudiantes de distintas carreras y niveles de estudio de la Pontificia Universidad Católica de Esmeraldas (Pucese), desde ayer son parte de un emprendimiento al interior del campus, que les permitirá, a la par, educarse y trabajar.
Ellos ahora son los administradores del bar local ‘La sazón de la Pucese’, quienes se organizan para turnarse y no descuidar sus horarios de clases, ni la atención de este negocio, que les generará recursos; y que estará abierto de lunes a domingo.
Aitor Urbina, pro-rector de la Pucese, manifestó que esto nació desde el departamento de Bienestar Universitario, quienes conjuntamente con Trabajo Social, se identificó quienes tenían dificultades económicas para cubrir sus estudios y tenían la predisposición para entrar al proyecto.
Vinculación universitaria
Gabriela Preciado, de noveno nivel de Enfermería, comentó lo motivada que está con este proyecto, por ello, se organizó desde muy temprano para enviar a sus tres hijos a la escuela y colegio y llegar temprano al campus, para a las 08:00 iniciar la atención junto con sus otros compañeros.
Su horario laboral será hasta las 13:00, porque a partir de las 14:00 tiene que asistir a clases, y así todos han planificado sus tiempos, esperando que la comunidad educativa les apoye en este espacio que les permitirá mantenerse en su formación académica.
Para Álex Carvajal, de cuarto semestre de Educación Básica, esta es una gran oportunidad que se les brinda para terminar sus estudios y, sobre todo porque tendrán un ingreso económico.
La estudiante del quinto nivel de Enfermería, Pamela Borbor, manifestó que es esencial que la universidad haya tenido esta iniciativa, porque es una verdadera vinculación con lo laboral y mucho más con la universidad.
Capacitación previa
El docente, Freddy Betancur, responsable de la capacitación, dio a conocer que de acuerdo a la planificación, se les brindo una instrucción de 20 horas, sobre servicio y atención al cliente; y normas de higiene, antes, durante y después de los expendios de los desayunos, almuerzo y meriendas.
Génova Zambrano, orientadora de la Pucese, explicó que hace un mes, el sacerdote Johnny, responsable del departamento de Bienestar Estudiantil, lideró el proceso y gestionó el financiamiento que salió de la misma universidad, el que también cubre los uniformes. Además se incluyó capacitaciones en lenguaje corporal, relaciones personales, comunicación.
VOCES
“Como madre de familia, este trabajo será un apoyo económico para mi familia y para avanzar y muy pronto culminar mis estudios”
Pamela Borbor,
Estudiante de quinto nivel de Enfermería.
“Esto nos motiva a continuar estudiando y sobre todo será un referente para otros alumnos que a futuro también puedan participar”
Alex Carvajal,
Cuarto semestre de Educación Básica.
“Nos organizamos, porque unos cocinamos, otros atienden con precio módicos acorde al bolsillo de la comunidad educativa”
Gabriela Preciado,
Noveno nivel de Enfermería.
Veinticinco estudiantes de distintas carreras y niveles de estudio de la Pontificia Universidad Católica de Esmeraldas (Pucese), desde ayer son parte de un emprendimiento al interior del campus, que les permitirá, a la par, educarse y trabajar.
Ellos ahora son los administradores del bar local ‘La sazón de la Pucese’, quienes se organizan para turnarse y no descuidar sus horarios de clases, ni la atención de este negocio, que les generará recursos; y que estará abierto de lunes a domingo.
Aitor Urbina, pro-rector de la Pucese, manifestó que esto nació desde el departamento de Bienestar Universitario, quienes conjuntamente con Trabajo Social, se identificó quienes tenían dificultades económicas para cubrir sus estudios y tenían la predisposición para entrar al proyecto.
Vinculación universitaria
Gabriela Preciado, de noveno nivel de Enfermería, comentó lo motivada que está con este proyecto, por ello, se organizó desde muy temprano para enviar a sus tres hijos a la escuela y colegio y llegar temprano al campus, para a las 08:00 iniciar la atención junto con sus otros compañeros.
Su horario laboral será hasta las 13:00, porque a partir de las 14:00 tiene que asistir a clases, y así todos han planificado sus tiempos, esperando que la comunidad educativa les apoye en este espacio que les permitirá mantenerse en su formación académica.
Para Álex Carvajal, de cuarto semestre de Educación Básica, esta es una gran oportunidad que se les brinda para terminar sus estudios y, sobre todo porque tendrán un ingreso económico.
La estudiante del quinto nivel de Enfermería, Pamela Borbor, manifestó que es esencial que la universidad haya tenido esta iniciativa, porque es una verdadera vinculación con lo laboral y mucho más con la universidad.
Capacitación previa
El docente, Freddy Betancur, responsable de la capacitación, dio a conocer que de acuerdo a la planificación, se les brindo una instrucción de 20 horas, sobre servicio y atención al cliente; y normas de higiene, antes, durante y después de los expendios de los desayunos, almuerzo y meriendas.
Génova Zambrano, orientadora de la Pucese, explicó que hace un mes, el sacerdote Johnny, responsable del departamento de Bienestar Estudiantil, lideró el proceso y gestionó el financiamiento que salió de la misma universidad, el que también cubre los uniformes. Además se incluyó capacitaciones en lenguaje corporal, relaciones personales, comunicación.
VOCES
“Como madre de familia, este trabajo será un apoyo económico para mi familia y para avanzar y muy pronto culminar mis estudios”
Pamela Borbor,
Estudiante de quinto nivel de Enfermería.
“Esto nos motiva a continuar estudiando y sobre todo será un referente para otros alumnos que a futuro también puedan participar”
Alex Carvajal,
Cuarto semestre de Educación Básica.
“Nos organizamos, porque unos cocinamos, otros atienden con precio módicos acorde al bolsillo de la comunidad educativa”
Gabriela Preciado,
Noveno nivel de Enfermería.
Veinticinco estudiantes de distintas carreras y niveles de estudio de la Pontificia Universidad Católica de Esmeraldas (Pucese), desde ayer son parte de un emprendimiento al interior del campus, que les permitirá, a la par, educarse y trabajar.
Ellos ahora son los administradores del bar local ‘La sazón de la Pucese’, quienes se organizan para turnarse y no descuidar sus horarios de clases, ni la atención de este negocio, que les generará recursos; y que estará abierto de lunes a domingo.
Aitor Urbina, pro-rector de la Pucese, manifestó que esto nació desde el departamento de Bienestar Universitario, quienes conjuntamente con Trabajo Social, se identificó quienes tenían dificultades económicas para cubrir sus estudios y tenían la predisposición para entrar al proyecto.
Vinculación universitaria
Gabriela Preciado, de noveno nivel de Enfermería, comentó lo motivada que está con este proyecto, por ello, se organizó desde muy temprano para enviar a sus tres hijos a la escuela y colegio y llegar temprano al campus, para a las 08:00 iniciar la atención junto con sus otros compañeros.
Su horario laboral será hasta las 13:00, porque a partir de las 14:00 tiene que asistir a clases, y así todos han planificado sus tiempos, esperando que la comunidad educativa les apoye en este espacio que les permitirá mantenerse en su formación académica.
Para Álex Carvajal, de cuarto semestre de Educación Básica, esta es una gran oportunidad que se les brinda para terminar sus estudios y, sobre todo porque tendrán un ingreso económico.
La estudiante del quinto nivel de Enfermería, Pamela Borbor, manifestó que es esencial que la universidad haya tenido esta iniciativa, porque es una verdadera vinculación con lo laboral y mucho más con la universidad.
Capacitación previa
El docente, Freddy Betancur, responsable de la capacitación, dio a conocer que de acuerdo a la planificación, se les brindo una instrucción de 20 horas, sobre servicio y atención al cliente; y normas de higiene, antes, durante y después de los expendios de los desayunos, almuerzo y meriendas.
Génova Zambrano, orientadora de la Pucese, explicó que hace un mes, el sacerdote Johnny, responsable del departamento de Bienestar Estudiantil, lideró el proceso y gestionó el financiamiento que salió de la misma universidad, el que también cubre los uniformes. Además se incluyó capacitaciones en lenguaje corporal, relaciones personales, comunicación.
VOCES
“Como madre de familia, este trabajo será un apoyo económico para mi familia y para avanzar y muy pronto culminar mis estudios”
Pamela Borbor,
Estudiante de quinto nivel de Enfermería.
“Esto nos motiva a continuar estudiando y sobre todo será un referente para otros alumnos que a futuro también puedan participar”
Alex Carvajal,
Cuarto semestre de Educación Básica.
“Nos organizamos, porque unos cocinamos, otros atienden con precio módicos acorde al bolsillo de la comunidad educativa”
Gabriela Preciado,
Noveno nivel de Enfermería.