Hombre fue detenido por interferir labor policial

DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.
DETENIDO. Carlos Julio E.B., de 24 años, fue detenido por faltar de palabra a oficiales e interferir su acción, durante la ejecución del plan noche segura.

La madrugada del último domingo, en la parroquia Súa, tras la ejecución del plan ‘Noche Segura’, que consiste en el cierre de bares, discotecas, cantinas, karaokes, retiro de libadores e indigentes del espacio público, fue detenido Carlos Julio E.B., de 24 años, por interferir la labor policial y faltar de palabra a los gendarmes que cumplían su trabajo.

El hoy detenido, quien libaba en los exteriores de un bar sin nombre, al frente del parque de Súa junto a otros individuos, fue abordado por los gendarmes quienes de manera respetuosa solicitaron el retiro del área, siendo respondido con insultos y gritos.

A ello se le sumaron amenazas referentes a su posición laboral y de un presunto poder político, del cual gozaba el infractor. “Este continuó manifestando que no sabíamos con quién nos metíamos, que él trabajaba en el Municipio, que llamaría al Alcalde, al Vicealcalde, a un mayor, a un teniente y que nos haría perder nuestro trabajo”, refirió uno de los policías que actuó ese día.

Trató de llamar

Incluso, Carlos Julio E.B. marcó varios números de teléfono y generó un escándalo atrayendo a más personas, colocando en aprietos a los dos oficiales; asimismo, trató de sujetarlos y al no poder hacerlo increpó aún más la situación, por lo que para precautelar su integridad de los policías se solicitó colaboración a la central.

Al lugar llegaron dos unidades móviles y agentes del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) quienes ayudaron con la aprehensión del agresor y el retiro de los demás libadores de la zona.

Durante la valoración médica en el hospital Juan Carlos Guasti, de Atacames, el detenido mantuvo su actitud agresiva y las amenazas sobre la actividad laboral de los oficiales.

Durante su estancia en la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Tonsupa, intentó darse a la fuga, mas fue interceptado y neutralizado trasladándolo luego a la zona de aseguramiento transitorio en espera de la respectiva audiencia.

Sanción a

detenido

En el artículo 394 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), estipula que la persona que maltrate, insulte o agreda a los agentes encargados de precautelar el orden público en el ejercicio de sus funciones, será sancionada con cárcel de cinco a 10 días.

La madrugada del último domingo, en la parroquia Súa, tras la ejecución del plan ‘Noche Segura’, que consiste en el cierre de bares, discotecas, cantinas, karaokes, retiro de libadores e indigentes del espacio público, fue detenido Carlos Julio E.B., de 24 años, por interferir la labor policial y faltar de palabra a los gendarmes que cumplían su trabajo.

El hoy detenido, quien libaba en los exteriores de un bar sin nombre, al frente del parque de Súa junto a otros individuos, fue abordado por los gendarmes quienes de manera respetuosa solicitaron el retiro del área, siendo respondido con insultos y gritos.

A ello se le sumaron amenazas referentes a su posición laboral y de un presunto poder político, del cual gozaba el infractor. “Este continuó manifestando que no sabíamos con quién nos metíamos, que él trabajaba en el Municipio, que llamaría al Alcalde, al Vicealcalde, a un mayor, a un teniente y que nos haría perder nuestro trabajo”, refirió uno de los policías que actuó ese día.

Trató de llamar

Incluso, Carlos Julio E.B. marcó varios números de teléfono y generó un escándalo atrayendo a más personas, colocando en aprietos a los dos oficiales; asimismo, trató de sujetarlos y al no poder hacerlo increpó aún más la situación, por lo que para precautelar su integridad de los policías se solicitó colaboración a la central.

Al lugar llegaron dos unidades móviles y agentes del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) quienes ayudaron con la aprehensión del agresor y el retiro de los demás libadores de la zona.

Durante la valoración médica en el hospital Juan Carlos Guasti, de Atacames, el detenido mantuvo su actitud agresiva y las amenazas sobre la actividad laboral de los oficiales.

Durante su estancia en la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Tonsupa, intentó darse a la fuga, mas fue interceptado y neutralizado trasladándolo luego a la zona de aseguramiento transitorio en espera de la respectiva audiencia.

Sanción a

detenido

En el artículo 394 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), estipula que la persona que maltrate, insulte o agreda a los agentes encargados de precautelar el orden público en el ejercicio de sus funciones, será sancionada con cárcel de cinco a 10 días.

La madrugada del último domingo, en la parroquia Súa, tras la ejecución del plan ‘Noche Segura’, que consiste en el cierre de bares, discotecas, cantinas, karaokes, retiro de libadores e indigentes del espacio público, fue detenido Carlos Julio E.B., de 24 años, por interferir la labor policial y faltar de palabra a los gendarmes que cumplían su trabajo.

El hoy detenido, quien libaba en los exteriores de un bar sin nombre, al frente del parque de Súa junto a otros individuos, fue abordado por los gendarmes quienes de manera respetuosa solicitaron el retiro del área, siendo respondido con insultos y gritos.

A ello se le sumaron amenazas referentes a su posición laboral y de un presunto poder político, del cual gozaba el infractor. “Este continuó manifestando que no sabíamos con quién nos metíamos, que él trabajaba en el Municipio, que llamaría al Alcalde, al Vicealcalde, a un mayor, a un teniente y que nos haría perder nuestro trabajo”, refirió uno de los policías que actuó ese día.

Trató de llamar

Incluso, Carlos Julio E.B. marcó varios números de teléfono y generó un escándalo atrayendo a más personas, colocando en aprietos a los dos oficiales; asimismo, trató de sujetarlos y al no poder hacerlo increpó aún más la situación, por lo que para precautelar su integridad de los policías se solicitó colaboración a la central.

Al lugar llegaron dos unidades móviles y agentes del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) quienes ayudaron con la aprehensión del agresor y el retiro de los demás libadores de la zona.

Durante la valoración médica en el hospital Juan Carlos Guasti, de Atacames, el detenido mantuvo su actitud agresiva y las amenazas sobre la actividad laboral de los oficiales.

Durante su estancia en la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Tonsupa, intentó darse a la fuga, mas fue interceptado y neutralizado trasladándolo luego a la zona de aseguramiento transitorio en espera de la respectiva audiencia.

Sanción a

detenido

En el artículo 394 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), estipula que la persona que maltrate, insulte o agreda a los agentes encargados de precautelar el orden público en el ejercicio de sus funciones, será sancionada con cárcel de cinco a 10 días.

La madrugada del último domingo, en la parroquia Súa, tras la ejecución del plan ‘Noche Segura’, que consiste en el cierre de bares, discotecas, cantinas, karaokes, retiro de libadores e indigentes del espacio público, fue detenido Carlos Julio E.B., de 24 años, por interferir la labor policial y faltar de palabra a los gendarmes que cumplían su trabajo.

El hoy detenido, quien libaba en los exteriores de un bar sin nombre, al frente del parque de Súa junto a otros individuos, fue abordado por los gendarmes quienes de manera respetuosa solicitaron el retiro del área, siendo respondido con insultos y gritos.

A ello se le sumaron amenazas referentes a su posición laboral y de un presunto poder político, del cual gozaba el infractor. “Este continuó manifestando que no sabíamos con quién nos metíamos, que él trabajaba en el Municipio, que llamaría al Alcalde, al Vicealcalde, a un mayor, a un teniente y que nos haría perder nuestro trabajo”, refirió uno de los policías que actuó ese día.

Trató de llamar

Incluso, Carlos Julio E.B. marcó varios números de teléfono y generó un escándalo atrayendo a más personas, colocando en aprietos a los dos oficiales; asimismo, trató de sujetarlos y al no poder hacerlo increpó aún más la situación, por lo que para precautelar su integridad de los policías se solicitó colaboración a la central.

Al lugar llegaron dos unidades móviles y agentes del Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) quienes ayudaron con la aprehensión del agresor y el retiro de los demás libadores de la zona.

Durante la valoración médica en el hospital Juan Carlos Guasti, de Atacames, el detenido mantuvo su actitud agresiva y las amenazas sobre la actividad laboral de los oficiales.

Durante su estancia en la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Tonsupa, intentó darse a la fuga, mas fue interceptado y neutralizado trasladándolo luego a la zona de aseguramiento transitorio en espera de la respectiva audiencia.

Sanción a

detenido

En el artículo 394 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), estipula que la persona que maltrate, insulte o agreda a los agentes encargados de precautelar el orden público en el ejercicio de sus funciones, será sancionada con cárcel de cinco a 10 días.