RITA MACÍAS ZAMBRANO
Este es el titular con que la Prefectura ha promocionado desde hace un mes el despliegue de actividades artísticas, culturales sociales y educativas. Es loable la actividad articulada que junto al Distrito de Educación está encaminando esta institución gubernamental, no solo oportuna en estos momentos en que la sociedad civil junto a la escuela y demás entidades, debemos levantar la ya decaída educación, sino, sobre todo, por la intención de empoderarnos de nuestro folclor y sus características peculiares de esta hermosa tierra ecuatoriana.
Esta tierra asentada en el norte de este multiétnico y pluricultural país: tierra de Delfina Torres de Concha en la lucha por la libertad esmeraldeña, de Carla Canora con su fino cantar al mundo, del serpenteo de Petita Palma, de Adalinda Zamora en la poesía que embriaga el alma, o de la abnegada y autentica educadora Margarita Cortés, así como de mujeres enmarcadas en la política y que nos representan dignamente: la carismática figura de Roberta Zambrano Ortiz, prefecta; la asambleísta Rina Campaín, y la alcaldesa, Lucía Sosa.
‘Yo soy Esmeraldas’ es la personificación de ese individuo sea negro, mulato, cholo o montubio que reclama a los gobernantes de turno mejores días para esta nuestra fecunda y gloriosa tierra, vivificando perpetuamente el alma de Alonso de Illescas aquel que luchó por romper los yugos de la raza y las pretensiones coloniales españolas. ‘Yo soy Esmeraldas’ significa tener la fuerza de Luis Vargas Torres, Luis Cervantes, Carlos Concha Torres militantes de la Revolución de Alfaro.
Esmeraldas ‘Cuna de deportistas, poetas, escritores, reinas de belleza y políticos’, esta es la tierra de Rosita Wila, Papá Roncón, Antonio Preciado, Nelson Estupiñán Bass, Adalberto Ortiz, Julio Micolta Cuero y muchos personajes de una innumerable lista, ejemplo para la sociedad esmeraldeña y la patria toda. Esmeraldas tiene una situación estructuralmente compleja. Por una parte la provincia tiene recursos naturales importantes, como bosques, agua, pesca, está ubicada en el Chocó Biogeográfico, una red vial importante y en buen estado, pero por otro, uno de los indicadores sociales más bajos del país.
De allí que sintonizado con la época que vive el país y el mundo, debemos clamar por mayor justicia y equidad social, por mejorar la educación como instrumento principal de desarrollo humano. “Desde el mar a las nieves del Ande, por doquier libertad esparciendo, van tus hijos heroicos luchando, por la ruta de todo lo grande”.
RITA MACÍAS ZAMBRANO
Este es el titular con que la Prefectura ha promocionado desde hace un mes el despliegue de actividades artísticas, culturales sociales y educativas. Es loable la actividad articulada que junto al Distrito de Educación está encaminando esta institución gubernamental, no solo oportuna en estos momentos en que la sociedad civil junto a la escuela y demás entidades, debemos levantar la ya decaída educación, sino, sobre todo, por la intención de empoderarnos de nuestro folclor y sus características peculiares de esta hermosa tierra ecuatoriana.
Esta tierra asentada en el norte de este multiétnico y pluricultural país: tierra de Delfina Torres de Concha en la lucha por la libertad esmeraldeña, de Carla Canora con su fino cantar al mundo, del serpenteo de Petita Palma, de Adalinda Zamora en la poesía que embriaga el alma, o de la abnegada y autentica educadora Margarita Cortés, así como de mujeres enmarcadas en la política y que nos representan dignamente: la carismática figura de Roberta Zambrano Ortiz, prefecta; la asambleísta Rina Campaín, y la alcaldesa, Lucía Sosa.
‘Yo soy Esmeraldas’ es la personificación de ese individuo sea negro, mulato, cholo o montubio que reclama a los gobernantes de turno mejores días para esta nuestra fecunda y gloriosa tierra, vivificando perpetuamente el alma de Alonso de Illescas aquel que luchó por romper los yugos de la raza y las pretensiones coloniales españolas. ‘Yo soy Esmeraldas’ significa tener la fuerza de Luis Vargas Torres, Luis Cervantes, Carlos Concha Torres militantes de la Revolución de Alfaro.
Esmeraldas ‘Cuna de deportistas, poetas, escritores, reinas de belleza y políticos’, esta es la tierra de Rosita Wila, Papá Roncón, Antonio Preciado, Nelson Estupiñán Bass, Adalberto Ortiz, Julio Micolta Cuero y muchos personajes de una innumerable lista, ejemplo para la sociedad esmeraldeña y la patria toda. Esmeraldas tiene una situación estructuralmente compleja. Por una parte la provincia tiene recursos naturales importantes, como bosques, agua, pesca, está ubicada en el Chocó Biogeográfico, una red vial importante y en buen estado, pero por otro, uno de los indicadores sociales más bajos del país.
De allí que sintonizado con la época que vive el país y el mundo, debemos clamar por mayor justicia y equidad social, por mejorar la educación como instrumento principal de desarrollo humano. “Desde el mar a las nieves del Ande, por doquier libertad esparciendo, van tus hijos heroicos luchando, por la ruta de todo lo grande”.
RITA MACÍAS ZAMBRANO
Este es el titular con que la Prefectura ha promocionado desde hace un mes el despliegue de actividades artísticas, culturales sociales y educativas. Es loable la actividad articulada que junto al Distrito de Educación está encaminando esta institución gubernamental, no solo oportuna en estos momentos en que la sociedad civil junto a la escuela y demás entidades, debemos levantar la ya decaída educación, sino, sobre todo, por la intención de empoderarnos de nuestro folclor y sus características peculiares de esta hermosa tierra ecuatoriana.
Esta tierra asentada en el norte de este multiétnico y pluricultural país: tierra de Delfina Torres de Concha en la lucha por la libertad esmeraldeña, de Carla Canora con su fino cantar al mundo, del serpenteo de Petita Palma, de Adalinda Zamora en la poesía que embriaga el alma, o de la abnegada y autentica educadora Margarita Cortés, así como de mujeres enmarcadas en la política y que nos representan dignamente: la carismática figura de Roberta Zambrano Ortiz, prefecta; la asambleísta Rina Campaín, y la alcaldesa, Lucía Sosa.
‘Yo soy Esmeraldas’ es la personificación de ese individuo sea negro, mulato, cholo o montubio que reclama a los gobernantes de turno mejores días para esta nuestra fecunda y gloriosa tierra, vivificando perpetuamente el alma de Alonso de Illescas aquel que luchó por romper los yugos de la raza y las pretensiones coloniales españolas. ‘Yo soy Esmeraldas’ significa tener la fuerza de Luis Vargas Torres, Luis Cervantes, Carlos Concha Torres militantes de la Revolución de Alfaro.
Esmeraldas ‘Cuna de deportistas, poetas, escritores, reinas de belleza y políticos’, esta es la tierra de Rosita Wila, Papá Roncón, Antonio Preciado, Nelson Estupiñán Bass, Adalberto Ortiz, Julio Micolta Cuero y muchos personajes de una innumerable lista, ejemplo para la sociedad esmeraldeña y la patria toda. Esmeraldas tiene una situación estructuralmente compleja. Por una parte la provincia tiene recursos naturales importantes, como bosques, agua, pesca, está ubicada en el Chocó Biogeográfico, una red vial importante y en buen estado, pero por otro, uno de los indicadores sociales más bajos del país.
De allí que sintonizado con la época que vive el país y el mundo, debemos clamar por mayor justicia y equidad social, por mejorar la educación como instrumento principal de desarrollo humano. “Desde el mar a las nieves del Ande, por doquier libertad esparciendo, van tus hijos heroicos luchando, por la ruta de todo lo grande”.
RITA MACÍAS ZAMBRANO
Este es el titular con que la Prefectura ha promocionado desde hace un mes el despliegue de actividades artísticas, culturales sociales y educativas. Es loable la actividad articulada que junto al Distrito de Educación está encaminando esta institución gubernamental, no solo oportuna en estos momentos en que la sociedad civil junto a la escuela y demás entidades, debemos levantar la ya decaída educación, sino, sobre todo, por la intención de empoderarnos de nuestro folclor y sus características peculiares de esta hermosa tierra ecuatoriana.
Esta tierra asentada en el norte de este multiétnico y pluricultural país: tierra de Delfina Torres de Concha en la lucha por la libertad esmeraldeña, de Carla Canora con su fino cantar al mundo, del serpenteo de Petita Palma, de Adalinda Zamora en la poesía que embriaga el alma, o de la abnegada y autentica educadora Margarita Cortés, así como de mujeres enmarcadas en la política y que nos representan dignamente: la carismática figura de Roberta Zambrano Ortiz, prefecta; la asambleísta Rina Campaín, y la alcaldesa, Lucía Sosa.
‘Yo soy Esmeraldas’ es la personificación de ese individuo sea negro, mulato, cholo o montubio que reclama a los gobernantes de turno mejores días para esta nuestra fecunda y gloriosa tierra, vivificando perpetuamente el alma de Alonso de Illescas aquel que luchó por romper los yugos de la raza y las pretensiones coloniales españolas. ‘Yo soy Esmeraldas’ significa tener la fuerza de Luis Vargas Torres, Luis Cervantes, Carlos Concha Torres militantes de la Revolución de Alfaro.
Esmeraldas ‘Cuna de deportistas, poetas, escritores, reinas de belleza y políticos’, esta es la tierra de Rosita Wila, Papá Roncón, Antonio Preciado, Nelson Estupiñán Bass, Adalberto Ortiz, Julio Micolta Cuero y muchos personajes de una innumerable lista, ejemplo para la sociedad esmeraldeña y la patria toda. Esmeraldas tiene una situación estructuralmente compleja. Por una parte la provincia tiene recursos naturales importantes, como bosques, agua, pesca, está ubicada en el Chocó Biogeográfico, una red vial importante y en buen estado, pero por otro, uno de los indicadores sociales más bajos del país.
De allí que sintonizado con la época que vive el país y el mundo, debemos clamar por mayor justicia y equidad social, por mejorar la educación como instrumento principal de desarrollo humano. “Desde el mar a las nieves del Ande, por doquier libertad esparciendo, van tus hijos heroicos luchando, por la ruta de todo lo grande”.