Motociclista murió al estrellarse en puente

MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.
MUERTE. Un motociclista murió al estrellarse contra la baranda de un puente, en la parroquia Malimpia de Quinindé.

Mario Rubén Castillo Garófalo, de 25 años, murió en forma instantánea presuntamente al estrellarse la motocicleta marca Daytona color azul de placa HW-490Q, que conducía, con la baranda de un puente.

El hecho trágico ocurrió la mañana del último domingo en el Recinto ‘La T’, de la parroquia Malimpia del cantón Quinindé, fue un conductor que pasó por el sector quien se encontró con el accidente y dio aviso a los oficiales de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), de la T.

“El hecho sucedió en el puente sobre el río Aguas Claras, nos constituimos en el lugar y observamos en mitad del puente, el cuerpo sin vida de una persona, y a pocos metros una motocicleta estrellada contra la baranda del viaducto”, informó un agente policial.

Se llevaron el cadáver

Agregó que minutos después, llegaron al lugar varios ciudadanos que se identificaron como familiares del occiso, quienes se pusieron beligerantes, embarcaron el cadáver en el balde de una camioneta y se lo llevaron con rumbo desconocido.

“Como estábamos pocos efectivos, por precautelar nuestra integridad mantuvimos la calma, debido a que, incluso, varios curiosos apoyaron que se llevaran al muerto y la motocicleta, en una camioneta”, refirió, el gendarme.

Agregó que ello, a pesar de que le manifestaron sobre los problemas legales que acarrean esas actitudes. Hasta la tarde de ayer lunes en el centro forense de Esmeraldas no había ingresado ningún cadáver de Quinindé.

Mario Rubén Castillo Garófalo, de 25 años, murió en forma instantánea presuntamente al estrellarse la motocicleta marca Daytona color azul de placa HW-490Q, que conducía, con la baranda de un puente.

El hecho trágico ocurrió la mañana del último domingo en el Recinto ‘La T’, de la parroquia Malimpia del cantón Quinindé, fue un conductor que pasó por el sector quien se encontró con el accidente y dio aviso a los oficiales de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), de la T.

“El hecho sucedió en el puente sobre el río Aguas Claras, nos constituimos en el lugar y observamos en mitad del puente, el cuerpo sin vida de una persona, y a pocos metros una motocicleta estrellada contra la baranda del viaducto”, informó un agente policial.

Se llevaron el cadáver

Agregó que minutos después, llegaron al lugar varios ciudadanos que se identificaron como familiares del occiso, quienes se pusieron beligerantes, embarcaron el cadáver en el balde de una camioneta y se lo llevaron con rumbo desconocido.

“Como estábamos pocos efectivos, por precautelar nuestra integridad mantuvimos la calma, debido a que, incluso, varios curiosos apoyaron que se llevaran al muerto y la motocicleta, en una camioneta”, refirió, el gendarme.

Agregó que ello, a pesar de que le manifestaron sobre los problemas legales que acarrean esas actitudes. Hasta la tarde de ayer lunes en el centro forense de Esmeraldas no había ingresado ningún cadáver de Quinindé.

Mario Rubén Castillo Garófalo, de 25 años, murió en forma instantánea presuntamente al estrellarse la motocicleta marca Daytona color azul de placa HW-490Q, que conducía, con la baranda de un puente.

El hecho trágico ocurrió la mañana del último domingo en el Recinto ‘La T’, de la parroquia Malimpia del cantón Quinindé, fue un conductor que pasó por el sector quien se encontró con el accidente y dio aviso a los oficiales de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), de la T.

“El hecho sucedió en el puente sobre el río Aguas Claras, nos constituimos en el lugar y observamos en mitad del puente, el cuerpo sin vida de una persona, y a pocos metros una motocicleta estrellada contra la baranda del viaducto”, informó un agente policial.

Se llevaron el cadáver

Agregó que minutos después, llegaron al lugar varios ciudadanos que se identificaron como familiares del occiso, quienes se pusieron beligerantes, embarcaron el cadáver en el balde de una camioneta y se lo llevaron con rumbo desconocido.

“Como estábamos pocos efectivos, por precautelar nuestra integridad mantuvimos la calma, debido a que, incluso, varios curiosos apoyaron que se llevaran al muerto y la motocicleta, en una camioneta”, refirió, el gendarme.

Agregó que ello, a pesar de que le manifestaron sobre los problemas legales que acarrean esas actitudes. Hasta la tarde de ayer lunes en el centro forense de Esmeraldas no había ingresado ningún cadáver de Quinindé.

Mario Rubén Castillo Garófalo, de 25 años, murió en forma instantánea presuntamente al estrellarse la motocicleta marca Daytona color azul de placa HW-490Q, que conducía, con la baranda de un puente.

El hecho trágico ocurrió la mañana del último domingo en el Recinto ‘La T’, de la parroquia Malimpia del cantón Quinindé, fue un conductor que pasó por el sector quien se encontró con el accidente y dio aviso a los oficiales de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC), de la T.

“El hecho sucedió en el puente sobre el río Aguas Claras, nos constituimos en el lugar y observamos en mitad del puente, el cuerpo sin vida de una persona, y a pocos metros una motocicleta estrellada contra la baranda del viaducto”, informó un agente policial.

Se llevaron el cadáver

Agregó que minutos después, llegaron al lugar varios ciudadanos que se identificaron como familiares del occiso, quienes se pusieron beligerantes, embarcaron el cadáver en el balde de una camioneta y se lo llevaron con rumbo desconocido.

“Como estábamos pocos efectivos, por precautelar nuestra integridad mantuvimos la calma, debido a que, incluso, varios curiosos apoyaron que se llevaran al muerto y la motocicleta, en una camioneta”, refirió, el gendarme.

Agregó que ello, a pesar de que le manifestaron sobre los problemas legales que acarrean esas actitudes. Hasta la tarde de ayer lunes en el centro forense de Esmeraldas no había ingresado ningún cadáver de Quinindé.