Dos tatuajes, uno de un ala de cóndor y otro que decía ‘Freddy’ permitieron identificar el cadáver de Freddy Márquez, de 29 años, oriundo de la provincia de Esmeraldas, a quien su familia pensaba que había muerto ahogado, pero fue asesinado a pedradas.
Familiares del ahora occiso afirmaron que los médicos que le practicaron la necropsia en el Centro de Investigación y Ciencias Forenses de Santo Domingo, dijeron que tenía un golpe en la cabeza, siendo hallado sin vida el lunes anterior en la playa de Punta de Mico, en el cantón Pedernales, provincia de Manabí.
“Freddy era buscado desde cuando salió a retirar dinero de un banco para pagar quienes trabajaban con él en la agricultura (sembrando maíz)”, explicó Juan Parra, tío de la víctima. Freddy vivía en el sector Tabiasa, de la parroquia 10 de Agosto, cantón Pedernales.
Muerte violenta
“Como no regresaba a casa, el sábado se puso la denuncia y empezó la búsqueda”, añadió el familiar. Ellos se enteraron de la tragedia la madrugada del lunes y recién en la noche recuperaron los documentos de Freddy, cuando una persona anónima llamó a decir que encontraron sus papeles en el sector La Chorrera.
Los familiares informaron que el asesinato se habría producido por robarle lo que tenía Freddy. “Es muerte violenta, lo golpearon por robarle unos 1.400 dólares que cargaba”, dijeron.
Juan Parra agregó que su sobrino estaba irreconocible, incluso, su propio padre no lo identificó, debido a que el cadáver estaba hinchado, pero por los tatuajes supieron que se trataba de Freddy.
El cadáver fue llevado a Pedernales para velarlo en el centro. La víctima era oriunda de Esmeraldas, pero se radicó en Pedernales por motivos de trabajo donde encontró la muerte.