Familia damnificada clama por ayuda solidaria

Enseres. Los muebles, televisión, camas, colchones, cobijas, ropa, uniformes, útiles escolares, zapatos… fueron reducidos a escombros.
Enseres. Los muebles, televisión, camas, colchones, cobijas, ropa, uniformes, útiles escolares, zapatos… fueron reducidos a escombros.

IBARRA

Yadira Díaz, madre de dos niños, junto a su esposo Santiago Pupiales se quedaron sin las cosas que adquirieron para su hogar. Un incendio por causas aún desconocidas convirtió a su dormitorio en carbón y cenizas.

“El lunes salí a desyerbar un sembrío de maíz localizado cerca a la casa de mis padres, donde viven más de 27 años. Por ser advertida dejé a mi hijo afuera en el patio para que juegue con sus tres primos”, refiere la madre de escasos recursos económicos, mientras retira pedazos de carbón, que es en lo que se convirtieron algunos electrodomésticos.

El humilde dormitorio, de seis por tres metros, huele a humo. Los armarios, la televisión, las camas, colchones, cobijas y demás muebles con los que contaba la familia no sirven sino para retirarlos, empacar en sacos de yute y botar en algún basurero, asegura un vecino.

La tristeza de su madre, sus hermanas Belén y Escarlet, no cambia la alegría de sus pequeños hijos, que continúan entretenidos con su juego formando una bomba en el patio de tierra.

Yadira, quien no tiene trabajo, respira fuerte para no soltar su llanto y no se aparta de realizar sus tareas domésticas.

“Unos 350 dólares de nuestros pequeños ahorros que guardábamos en un cajoncito del armario, reunidos con tanto esfuerzo de mi esposo que trabaja pegando baldosas en los pisos, también fueron consumidos por las llamas”, dice.

Suceso

Los menores, que como de costumbre las tardes jugaban en el patio de tierra, gritaron fuerte cuando vieron el abundante humo que salía del dormitorio y cubría toda la casa, el lunes.

Escarlet, junto a dos vecinos comedidos, empujaron la puerta y apagaron las llamas con baldes de agua almacenada en la fosa de la lavandería.

“Eso nos salvó, de lo contrario el fuego se abría propagado hacia los demás habitaciones”, asegura.

“Me duele el alma ver convertido en cenizas los uniformes, los cuadernos, los zapatos, libros y mochila de mi hijo de seis años que asiste a la escuela”, resalta. Ni el incendio lo ha detenido a Santiago para llegar a su aula de forma puntual. Las tardes se da modos para hacer sus tareas ahora en una mesa de su abuela, que amorosa cuida de sus nietos.

Una de sus hermanas asegura que la causa de este siniestro pudo ser el calentamiento y explosión de un televisor que compraron hace aproximadamente unos 10 años.

El Crnel. Fabián López, comandante del Cuerpo de Bomberos de Ibarra, asegura que personal especializado llegó al lugar poco después que se generó la voz de alerta.

Las causas del incendio aún se desconocen. Los ‘casaca roja’ no cuentan con peritos especializados para que investiguen a fondo los hechos y no es prudente hacer una evaluación superficial y peor todavía afirmar tal o cual circunstancia, porque después no se va a poder comprobar, explicó el oficial.

“Nuestro deber es prevenir los incendios, antes de entrar a apagarlos, mediante la capacitación a las familias que requieren aprender una habilidad para que cuando ocurren situaciones lamentables puedan superar estos fatales inconvenientes”, dijo.

La Ley contra Incendios les permite capacitar y estar pendiente de siniestros en locales comerciales o instituciones públicas. Los barrios y comunidades deben solicitar ayuda para proporcionar información, afirmó el bombero.

Informó que en estos 10 meses del año se ha controlado 32 incendios estructurales de viviendas, 22 conatos (inicios), 4 hornillas y velas encendidas, 13 alarmas por corto circuitos, 28 vehículos inflamados, 55 incendios forestales, 114 conatos forestales, 192 quemas agrícolas y 107 quemas de basura.

Buscan reponer los bienes perdidos

Tania Endara, de la oficina de Desarrollo Económico e Inclusión Social, junto a Pablo Zambrano, de la Unidad de Gestión de Riesgos del GAD Municipal de Ibarra, coordinan varias acciones de solidaridad de la ciudadanía, de alrededor de 800 trabajadores municipales, de la Radio Municipal y del pueblo ibarreño que desee colaborar con la familia Díaz Pupiales.

“En los próximos días se convocará de manera pública, a través de Radio Municipal, de las necesidades más urgentes de la familia Díaz Pupiales para que las personas caritativas se acerquen a donar vituallas”, dijo Endara.

Se anunció que el viernes una comisión acudirá hasta el barrio San Francisco de Chorlaví a visitar a la familia, llevando todo lo que haya recolectado.

“Estamos seguros que los ibarreños no dudarán en demostrar su espíritu solidario y caritativo como siempre lo han hecho”, expresó. (CHWR)

TOME NOTA

Para cualquier ayuda se pueden comunicar al teléfono: 099 557 34 79, de Yadira Díaz; o al 098 994 09 80, de Pablo Zambrano.