Monseñor Leonidas Proaño tiene su legado en Ibarra

MISIÓN. La labor de monseñor es la base de trabajo de las nuevas generaciones.
MISIÓN. La labor de monseñor es la base de trabajo de las nuevas generaciones.

Redacción IBARRA

El sábado 31 de agosto se conmemora un año más de ‘resurrección’ del llamado Obispo de los indios y de los pobres. Su nombre es Leonidas Proaño, ibarreño, notable personaje, quien luchó por introducir la justicia social en el país. Por ello, hoy, domingo 25 de agosto, se han preparado varias actividades, en Imbabura.

Nidia Arrobo Rodas, directora ejecutiva de la Fundación Pueblo Indio del Ecuador, indicó que iniciarán a las 08:30, con una caminata desde el monumento a monseñor, en San Antonio de Ibarra, hasta llegar al Centro de Formación de Misioneras Indígenas del Ecuador, ubicado en Pucahuaico.

“De ahí habrá una eucaristía y después la gente podrá ver la muestra fotográfica. Habrá el festival del maíz, que ya lo hemos hecho. Y habrá una tarde cultural, donde rendiremos homenaje a las lenguas originarias”, detalló.

Agregó que el mensaje de Monseñor Leonidas Proaño, que quisiera que recordemos, es el que expresó en su lecho de agonía. Ahí, el religioso le dijo al presidente Rodrigo Borja y a la humanidad: “Valore y haga valorar, respete y haga respetar, ese tesoro que tenemos de los pueblos indígenas de la Patria”.

Una vida de trabajo

Después de renunciar al obispado, por cuestiones de edad, Leonidas Proaño fue nombrado presidente de la Pastoral Indígena. En su nueva función, en 1988, inauguró el Centro de Formación de Misioneras Indígenas del Ecuador, para el apoyo e investigación a las culturas indígenas y la formación de misioneras. Y el 12 de agosto de 1988 creó la Fundación Pueblo Indio del Ecuador.

Arrobo Rodas indica que monseñor, para la organización, fue el mentor, y creó estos proyectos en su lecho de agonía, hace 31 años. “Él es el ser humano que logró cambios fundamentales, no solo en la iglesia, sino en el sector político. Y gracias a su fuerza seguimos en la lucha por los derechos indígenas, humanos y de la naturaleza”.

La Fundación Pueblo Indio tiene diferentes programas en los que trabaja. Por ejemplo, en la profesionalización de jóvenes indígenas en las carreras superiores.

Se ocupan además en que los indígenas, jóvenes, adolescentes, de diferentes comunidades, que no hayan podido hacer el bachillerato, lo puedan realizar. “Mantenemos aquí un curso de salud natural durante todo el año, cada dos o tres meses. Mantenemos también la memoria viva de monseñor, publicando sus obras”.

Añade que la fundación está en contra del extractivismo. Además, apoya la lucha de los pueblos contra la minería, contra el petróleo y la defensa del Yasuní, donde hay poblados en aislamiento voluntario, como los waorani, taromenane o tagaeri. Pueblos, dice, que están desapareciendo. (PTEG)