Las víctimas eran obligadas a entregar las claves de sus tarjetas de crédito y débito.
Tres meses de investigaciones le tomó a la Policía desarticular una presunta organización delictiva dedicada al secuestro extorsivo. Las autoridades tenían denuncias de víctimas que fueron asaltadas bajo una modalidad común.
Los afectados eran abordados mientras ingresaban a los inmuebles con el auto. Una mujer se acercaba al conductor y mientras lo distraía sus cómplices entraban con violencia al carro para obligarlo a conducir con otro rumbo.
Las víctimas eran trasladadas a zonas despobladas. En el trayecto, los implicados obligaban al afectado a entregar las claves de sus tarjetas de crédito y débito. En ocasiones, cuando se resistían a proporcionar la información, los antisociales agredían físicamente hasta conseguir su objetivo.
El general Luis Lara, director nacional de la Policía Judicial, informó que durante el operativo ‘Impacto 192’, la Subdirección de Investigación de Delitos contra la Propiedad (Sidpro–BAC) capturó a cuatro sospechosos en delito flagrante.
Según informó, ellos fueron detenidos en la antigua vía a Conocoto mientras remolcaban el vehículo de una víctima que los acompañaba. El automotor se dañó en pleno asalto. Además de recuperar el auto, los uniformados rescataron al secuestrado.
EL DATO
Los cuatro presuntos delincuentes ya están a órdenes de las autoridades de justicia.Entre las evidencias que la Policía encontró están un revólver calibre 38 mm cargado con cinco municiones. El arma era empleada para amedrentar a los perjudicados.
También constan como evidencia siete tarjetas entre débito y crédito que presuntamente pertenecen a las víctimas. Los teléfonos celulares que portaban los sospechosos también serán materia de investigación.
Detenidos
Los implicados fueron identificados como Alonso Y., Franklin LL., Jéssica B. y David D. Este último tiene un amplio historial delictivo e incluso fue procesado por homicidio.
El general Lara informó que los involucrados tenían su centro de operaciones en el sur de Quito. En un inmueble se reunían para planificar los atracos cuyas víctimas eran principalmente residentes de los valles.
El coronel Pablo Ramírez, comandante de la Sidpro–BAC, indicó que las investigaciones revelaron la participación de los sujetos en asaltos al estilo sacapintas, robo a locales comerciales y robo de vehículos. (FLC)