El segundo feriado del mes de mayo se cumplirá este viernes 25 de mayo y no es recuperable, según lo establece la normativa vigente.
Este día de asueto corresponde al feriado del 24 de Mayo, en recordación de la Batalla de Pichincha y se extenderá durante tres días, entre viernes y domingo.
Precisamente como parte de este feriado las instituciones públicas, y gran parte del sector privado, no brindarán atención al público.
De igual forma en los establecimientos educativos tienen labores hasta el jueves y retornan a clases el día lunes 28 de mayo.
Lo turístico
Fabián Altamirano, coordinador zonal del Ministerio de Turismo, calificó como positivo que existan fechas establecidas para los feriados nacionales, enfatizando que “todos los feriados han causado un efecto económico positivo en el país”.
Como ejemplo, citó el funcionario, en los feriados de cuatro días existe un movimiento cercano al millón de visitas, mientras que en los feriados más cortos se generan entre 500 mil y 600 mil visitas a nivel nacional.
Asimismo Altamirano comentó que estos feriados son una oportunidad para recorrer el sur del Ecuador, para lo cual se viene desarrollando una campaña de promoción de esta zona del país.
Seguridad
Con miras a este feriado, adelantó el coordinador zonal, existe ya un plan de contingencia y seguridad, el mismo que será dado a conocer en las próximas horas.
EL DATO
El 24 de mayo de 1981 murió el presidente Jaime Roldós Aguilera al estrellarse el avión en que viajaba, luego del discurso que dio en el Estadio Olímpico Atahualpa, en Quito.
La historia
Resumen: La batalla, el 24 de Mayo de 1822, ocurrió en las faldas del Volcán Pichincha, a más de 3.000 metros sobre el nivel del mar. La lucha se dio entre el Ejército independentista, bajo el mando del general venezolano Antonio José de Sucre y el ejército realista, comandado por el general Aymerich. La derrota de las fuerzas españolas condujo a la liberación e independencia de República del Ecuador. El Ecuador a partir de tan importante gesta heroica, consolida su independencia y pone los primeros cimientos para que nuestro país camine por derroteros de esperanza y bienestar.