Los mismos y los mimos

Andrés Ontaneda

Aunque no es tiempo de contienda electoral, pero ya se huele las intenciones por acceder al poder y ocupar el curul de una u otra dignidad, inician a ventilarse los repetidos cuadros de politiqueo con ofertas excesivas, gastos inmedibles, imágenes emocionales y jugando al ser perfecto, mientras los del otro lado, los ciudadanos seguimos eligiendo a los mismos, nuestra generación será solamente una clonación que compartía el mismo ADN de pensamiento civilizado y nos convertiremos en gemelos idénticos separados solamente por una generación.

¿Por qué nos gobiernan los mismos? ; ¿para qué elegimos los mismos?; son inquietudes que nos rodean a diario en la polis, por ejemplo los presocráticos como “Heráclito creían que el mundo estaba hecho de fuego o Tales sostenía que, pese a las apariencias, toda la realidad se componía en el fondo de agua”, ¿Apariencia o realidad? esto sucedía por falta de crítica y neta apariencia, que hacía que el mundo se vea una forma engañadora, hoy seguimos en la misma época sin dar pasó a las nuevas ideas, a la juventud de pensamiento y a los adultos de reflexión, desapegado a la ciencia, a la verdad, la necesidad técnica y real que nos permita consolidar como ciudad y sociedad.

Además, que nos designen o impongan dirigentes en calidad de mimos que siguen actuando con su pensamiento monopolizado y supuestamente “racional”, sin entender que el ser humano es un ser con raciocinio bajo criterios de razón y emoción social para la participación humanitaria. Simplemente es cuestión de cada una de nuestras conciencias si nos dejamos llevar por los mismos y los mimos de siempre, o volcar el escenario hacia una nueva obra basada alternativas de la realidad con una visión normal en el sentido común de la tierra. Usted decide que obra quiere vivir. (O)

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