Richard E. Ruiz. O.
Después de unas merecidas vacaciones, el martes 21 de agosto de 2018 regresan los docentes del régimen Sierra y Amazonía, para preparar las actividades para el inicio del año lectivo 2018- 2019 ¿Cuál es la realidad educativa al inicio del año escolar? ¿Qué esperan los docentes a su regreso?
Se debió haber empezado, muchos opinan, por una revisión más prolija de la condición actual de los establecimientos educativos. Hasta el momento no se evidencia una “inversión significativa” en el mantenimiento de planteles o en la construcción de infraestructura educativa. Bastaría mirar el Adolfo Valarezo… Lo más lamentable es que ni siquiera existen autoridades distritales designadas, mucho menos rectores, vicerrectores, inspectores con el perfil requerido en la mayoría de planteles.
Los padres de familia ya están pensando en el costo de los útiles, textos y uniformes. Se dice que los mismos no podrán exceder un salario básico unificado, pero en la práctica se sabe, que los costos sobrepasan este valor. Por más denuncia que se presente de cobros excesivos en ocasiones las mismas no trascienden por parte de mandos “medios” que no hacen prevalecer la normativa legal.
Muchos se preguntan: ¿por qué educación inicial empieza clases un mes después? es decir en el mes de octubre, cuando bien se puede haber aprovechado este tiempo para el proceso de adaptación. Los docentes se han reintegrado a las instituciones educativas con más preguntas que respuestas. De qué sirve haber cambiado autoridades zonales, si las mismas no toman decisiones o son víctimas del centralismo, ya que desde la capital les dicen lo que deben o no hacer.
Los docentes están sumamente preocupados por el cronograma del proceso de recategorización y ascenso 2018, ya que muchos desde Desarrollo Profesional se olvidaron del mismo. Preocúpense de lo esencial, y dejen a un lado lo secundario: TINI, mi aula al 0%… Los docentes exigen: hechos, no palabras. Cambio y fuera. (O)