Dicen que tiene el mismo nivel de importancia que el hombre. Califican de sensata y equilibrada.
A propósito del Día Internacional de la Mujer, que se conmemoró el pasado 8 de marzo, los integrantes del Consejo Editorial Estudiantil de Diario La Hora, delegados de 23 colegios de la ciudad, se refieren al accionar de este sector, sobre todo en el campo de los derechos.
La idea de un Día Internacional de la Mujer surgió al final del siglo XIX, que fue, en el mundo industrializado, un período de expansión y turbulencia, crecimiento fulgurante de la población e ideologías radicales.
“Ser mujer significa todo un programa de vida, ya que no se nace mujer, se llega a serlo. Ser mujer significa confiar, siempre, en las posibilidades de lo humano, de ese ser que gestamos y alumbramos en comunión con la vida”. Así opina Doménica Solano, presidenta del Consejo Editorial Estudiantil de Diario La Hora y representante de la Unidad Educativa Antonio Peña Celi.
‘Elevar el nivel humano’
La joven acota que ser mujer también es elevar el nivel humano al máximo de lo posible creativo y no de lo limitado, desplegar la inteligencia dormida, la experiencia viva y los deseos latentes para la construcción de ese mundo que se sueña. “Ser mujer es algo que nos hace únicas, lo que nos define como tal y lo que nos inspira y motiva a ser quien somos en realidad”, precisa.
En criterio de Javier Alexandre Correa Rosillo, del Colegio de Bachillerato Daniel Álvarez Burneo, se vive en una sociedad presa del egoísmo varonil, que busca imponer su libertad y autoridad machista, y opacar, así, al pensamiento femenino.
“No obstante, jamás debemos omitir la sabiduría, orden y agilidad que pueden caracterizar a una mujer. Alguien dijo alguna vez: el mundo requiere de la fuerza de los hombres. Sí, puede ser (como también no), pero el mundo también requiere de la sensatez de las mujeres”, hace notar el estudiante danielino.
El 8 de marzo, según dice María de los Ángeles Cango Dávil, del Colegio de Bachillerato Beatriz Cueva de Ayora, es una fecha que conmemora la lucha de las mujeres obreras textiles de New York, todo por mejores salarios y condiciones de trabajo.
“Así que no necesitamos rosas, osos de peluche o chocolates, necesitamos libertad y seguridad. Una mujer lucha por tener los mismos derechos que los hombres no por ser igual que ellos”, manifiesta la joven estudiante del ‘Beatriz’.
‘La mejor creación de Dios’
Nerea Cecibel Pinzón Prado, representante de la Unidad Educativa Fiscomisional La Inmaculada, coincide con María de los Ángeles al opinar que el 8 de marzo es una fecha trascendente, toda vez que se evoca a “a esas valientes, sensibles, fuertes, cariñosas e, indudablemente, hermosas mujeres que con sus sonrisas nos imparten felicidad y confianza. Y es que no mienten cuando dicen que ellas son la mejor creación de Dios”.
Para José Alejandro Guayanay, de la Unidad Educativa Ateneo, el Día Internacional de la Mujer, busca resaltar el valor que tiene la mujer en la sociedad e intenta implementar la cultura de respeto a este género.
Asimismo, dice que se debe tomar en cuenta el frágil momento por el que pasa la conciencia sobre el valor de la mujer y sus distintos papeles en la sociedad y por la continua reactivación de antiguos modos de pensar que le quitaron ciertas libertades.
Dayanna Morillo, del Liceo de Loja, considera que las mujeres de todas las naciones, separadas por sus fronteras, traspasan diferencias para unirse en su día y ver la trascendencia que han cultivado dentro de la historia, confinada en la riqueza de logros obtenidos de la lucha plurisecular, en pro de participar en la sociedad en pie de igualdad, justicia e integridad con el hombre.
“Son las mujeres quienes persisten con osadía, determinación y fuerza en su voz para romper todas las barreras estructurales, que han limitado acelerar los avances hacia la equidad de género y la estadía de sujetar las mismas oportunidades”, comenta.
El estudiante ‘bernardino’, Andrés David Sandoya Zapata, opina que el 8 de marzo celebramos al ser que da vida, la mantiene y la alegra. Es que “no podemos negar el papel de madre, amiga, mentora, en fin, de mujer, que demuestra las cualidades superiores del ser humano y deja constancia de que una familia, el centro de la sociedad, no se puede mantener sin una mujer. (JPP)
La ONU y la Igualdad de género
La Carta de las Naciones Unidas, firmada en 1945, fue el primer acuerdo internacional para afirmar el principio de igualdad entre mujeres y hombres. Desde entonces, la ONU ha ayudado a crear un legado histórico de estrategias, normas, programas y objetivos acordados internacionalmente para mejorar la condición de las mujeres en todo el mundo.
Con los años, la ONU y sus organismos técnicos han promovido la participación de las mujeres en condiciones de igualdad con los hombres en el logro del desarrollo sostenible, la paz, la seguridad y el pleno respeto de los derechos humanos. El empoderamiento de la mujer sigue siendo un elemento central de los esfuerzos de la Organización para hacer frente a los desafíos sociales, económicos y políticos en todo el mundo.
No mienten cuando dicen que las mujeres son la mejor creación de Dios”
Nerea Cecibel Pinzón Prado
representante de la Unidad Educativa Fiscomisional La Inmaculada
El 8 de marzo celebramos al ser que da vida, la mantiene y la alegra…”
Andrés David Sandoya Zapata
Unidad Educativa del Milenio Bernardo Valdivieso
A pedir más cambios
Dayanna Morillo, del Liceo de Loja
El Día Internacional de la Mujer nos conduce a reflexionar acerca de los avances logrados, pedir más cambios y celebrar la osadía y la determinación de las mujeres. Nos conduce a creer en el valor, en la interrelación de las naciones que va más allá de la cultura, de las razas y del género. Es el momento para un impulso y conocer la soberanía de la voz.
Mujeres y hombres nos complementamos
Daniela Nicole Cueva Jiménez, Colegio de Bachillerato Miguel Ángel Suárez
La mujer va más allá de verse bonita y bien arreglada, es tener valentía para enfrentarse a circunstancias terribles y encontrar solución a los diferentes problemas que se nos plantea, es ayudar, ser compasiva y de demostrar que nosotras somos tan importantes como los hombres porque en sí, los dos nos complementamos.