Richard E. Ruiz O.
El envió para realizar tares en casa por parte del docente es una decisión que forma parte de la autonomía profesional de los docentes en base a los procesos de interaprendizaje.
Es importante considerar la cantidad de tareas. Es esencial cuidar que el tiempo y las preocupaciones en el hogar no se centren en completar, revisar y controlar el cumplimiento de las tareas ya que esto genera ansiedad en el hogar. Si el objetivo de la tarea es el refuerzo académico, entonces: ¿en el proceso de clase no existe la consolidación del aprendizaje?
Lo más importante es la estimación del tiempo que dedica cada estudiante realizar las tareas y que un exceso se puede volver contraproducente y afectar negativamente el aprendizaje. Si el estudiante no muestra expectativas ante la tarea, por consiguiente no se reforzará la conducta, ni el aprendizaje; sino se generará rechazo a la misma ¿Cómo es el proceso de evaluación de la tarea? El Padre de Familia que no conoce la rúbrica de valoración de la misma, considera que sin indicadores de evaluación, el proceso es subjetivo.
El tiempo dedicado a tareas aumentará de acuerdo con el nivel de instrucción: los estudiantes de primer grado de Educación General Básica (EGB) no tendrán deberes, de segundo a cuarto de EGB se propone de 30 a 40 minutos de tareas diarias, de quinto a séptimo de básica se plantean tareas que pueden tomar desde 40 hasta 60 minutos en total. En el caso de los jovénes de octavo a décimo de básica se pueden enviar deberes que no sobrepasen los 80 minutos. Los adolescentes de Bachillerato tendrán que cumplir con un máximo de dos horas de tareas diarias en los domicilios ¿El tiempo que demora la ejecución de la tarea debe regular el envió o no de las mismas? Se debe cambiar este formalismo. Son los docentes quienes deben regular el desarrollo de las tareas a sus estudiantes… Cambio y fuera. (O)