A finales del año 2018, un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), daba cuenta que en el Ecuador el déficit habitacional llega al 31% de los hogares, aproximadamente a 5,2 millones de personas.
Estas cifras no se alejan de la realidad de la ciudad de Loja, donde se estima que el déficit se ubicaría entre 20 mil y 30 mil viviendas.
Para, en algo, paliar esta situación se hace necesario un trabajo que involucre al Estado y los gobiernos locales.
En el caso de Loja, en las anteriores administraciones del alcalde Jorge Bailón se trabajó en cuatro programas de vivienda: Ciudad Alegría y Ciudad Victoria; así como en las parroquias Santiago y San Lucas. Además, se generó el proyecto de lotes con servicio, en La Cascarilla.
Esto permitió concretar alrededor de 3 mil soluciones habitacionales.
Proyección
Diego Ramón, director de Regeneración Urbana y asesor de la alcaldía de Loja, señala que el déficit habitacional del cantón es bastante alto y reconoce que los programas ejecutados resultan escasos ante la magnitud de este problema.
En esta nueva administración están previstos nuevos proyectos que esperan poder cristalizarlos desde 2020, señaló el funcionario.
La aspiración, hasta el final del periodo, es contar con 2 mil o 3 mil nuevas soluciones habitacionales, y aunque puede resultar una cifra baja, Diego Ramón dice que se debe considerar que prácticamente el Municipio de Loja es la única entidad que está generando programas de vivienda.
“Para poder abarcar de manera integral y global (el déficit habitacional) es el estado central el que también debe asumir esta responsabilidad”, recalcó el asesor de la alcaldía.