Eddy Arrobo Rodríguez
En la obra del Dr. Rodrigo Borja, Enciclopedia de la Política, señala que el término “outsider” se designa al individuo que por propia voluntad, se ha mantenido al margen de la vida pública. Existen personas a nivel mundial que sin tener ningún antecedente de participación política, han sido elegidas en votaciones universales para ejercer funciones públicas sin ser parte de los partidos políticos tradicionales.
En nuestro país se avecina un proceso electoral, donde la mayoría demuestra una actitud de indiferencia y apatía, por el resultado del sometimiento de la corrupción de políticos disfrazados de funcionarios públicos sin ética, ni moral que han llevado al país al caos político, social y económico.
La crisis nos obliga a ser responsables, a investigar, a tener conciencia crítica y sopesar los comportamientos y formas de actuar que han tenido en su cotidianidad los futuros representantes; es fácil hacer memoria, y castigarlos por ser aliados a los grupos de poder lo cual se demostró con sus apoyos a Leyes que dan como resultado la precariedad laboral, y la no incautación de los bienes obtenidos de la corrupción.
Se acerca el período electoral y a la gente no le importa; se cansó de politiqueros, arribistas, oportunistas, discapacitados morales que crean una masa amorfa de frentes políticos por doquier con tal de privilegiar sus beneficios personales y solo luchan por el poder. Es imperativo que salga el denominado “Outsider”, persona virtuosa que debe estar comprometida con la moralidad, honorabilidad, decencia y honradez, el mismo que debe repensar en otra visión de hacer una política consistente con funcionarios con virtudes incorruptibles a favor de la gente.