La automedicación es grave y puede provocar la muerte

CONSECUENCIAS. La ingesta inadecuada de fármacos de fácil acceso tiene resultados negativos.
CONSECUENCIAS. La ingesta inadecuada de fármacos de fácil acceso tiene resultados negativos.

Los antiinflamatorios, los antigripales, los antibióticos y los analgésicos son los medicamentos más utilizados para aliviar dolores, fiebres y malestares, que a la larga pueden generar resistencia, esconder enfermedades más graves y causar la muerte.

La automedicación, que es el consumo de fármacos sin el diagnóstico y la prescripción del especialista, es un mal mundial que se ha convertido en un problema de salud pública, dice Carlos Montenegro, médico internista del Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM).

Montenegro explica que “si el medicamento recetado implica riesgo, al consumirlo sin una guía adecuada existe más peligro”.

Las gripes, los dolores de cabeza y de estómago son los principales síntomas por los que la gente recurre a tomar el medicamento sin prescripción, dice el experto.

Análisis

Montenegro pone como ejemplo al AH1N1, en el que sus síntomas hacen presumir un resfriado y la persona afectada ingiere antigripales. En este caso, enmascara los signos de la enfermedad y da paso a que progrese y se agrave.

Lo mismo sucede, en algunos casos, con otras dolencias, afirma el gastroenterólogo José Guzmán, quien labora en el HCAM.

El consumo de ibuprofeno o diclofenaco -fármaco de venta libre- para aliviar el dolor, puede generar una gastritis y quienes tienen esta condición crónica desarrollarían úlceras gástricas o duodenales, las que que terminan en hemorragias, hospitalización prolongada, requieren transfusiones sanguíneas y comprometen su vida.

En su experiencia, Guzmán dice que estos casos tienen mayor prevalencia en pacientes de la tercera edad. Aclara que los jóvenes no están exentos de efectos secundarios, si recurren a la automedicación

Resultados negativos

Los antigripales son “un coctel de medicamentos” que contienen antihistamínicos de primera generación (para tratar los síntomas de alergia). Producen sueño y también vasoconstrictores (estrechamiento de los vasos sanguíneos), que descompensarían a un paciente con problemas de presión alta.

Los antiinflamatorios no esteroidales, como el paracetamol e ibuprofeno -los más consumidos-, se usan para aliviar el dolor y la fiebre, pero al no tomar la dosis correspondiente, en el tiempo adecuado, causa efectos negativos o no da el resultado deseado.

El paracetamol en dosis excesiva puede producir una intoxicación hepática. Mientras, el Ibuprofeno afecta a la mucosa gástrica o al riñón, dice Montenegro.

En cuanto a los antibióticos, el médico internista dice que el mayor problema es la resistencia que se crea y el paciente requerirá cada vez de dosis o medicamentos más fuertes.

Las intoxicaciones también son el resultado de la ingesta de medicamento sin orientación profesional. Las personas pueden tener alergia a uno o varios componentes del que están hechos los fármacos.

El especialista afirma que el abuso de esta práctica termina afectando a uno o varios órganos, depende del fármaco que haya ingerido. (CM)

Efectos
Contraproducentes

Hemorragias intestinales.

Resistencia antibacteriana.

Intoxicación y reacciones alérgicas.

Ocultamiento de síntomas.

Empeoramiento de enfermedades

Muerte.

El camino correcto

El médico internista Carlos Montenegro recomienda que ante cualquier dolencia, se acuda al médico y que siga, “al pie de la letra”, las instrucciones.

Asimismo, dice en ningún caso hay que tomar pastillas recetadas por un familiar o allegado, que no solicite ayuda a las personas que venden en las farmacias y a su vez que ellas se nieguen a entregar medicamentos o inyecciones, si la gente no cuenta con una receta médica.