Marte albergó vida al comienzo

Marte albergó vida al comienzo
Marte albergó vida al comienzo

Marte albergó vida al comienzo

Washington, EFE

Marte fue un planeta cálido y húmedo en su «infancia», cuando pudo haber contado con un ambiente propicio para el desarrollo de la vida, pero eso terminó muy pronto, según un estudio divulgado ayer por la revista ‘Science’.

Cuando aún no se había desarrollado completamente, el planeta sufrió un importante cambio de clima que lo convirtió en un objeto frío, árido y ácido, según el estudio efectuado por científicos franceses, italianos, rusos, alemanes y estadounidenses.

«Hace 3.500 millones de años, las condiciones ambientales en Marte se hicieron cada vez más secas y ácidas, un lugar desagradable para cualquier tipo de vida, ni siquiera la de un microbio», dice en el informe John Mustard, geólogo de la Universidad de Brown, en el estado de Rhode Island.

La conclusión del estudio se basa en la historia mineral de Marte, que está estrechamente vinculada a la presencia de agua en el planeta y fue formulada con datos proporcionados por las misiones de órbita y los vehículos exploradores de la NASA en Marte.

El grupo de científicos, encabezado por Jean-Pierre Bibring, astrofísico de la Universidad de París, determinó que en Marte hubo tres eras geológicas claramente definidas.

La primera, que comenzó con el nacimiento del planeta hace unos 4.600 millones de años, duró unos 600 millones de años.

En la segunda, hace entre 4.000 y 3.500 millones de años, hubo un cambio dramático en el que el ambiente cálido y alcalino dio paso a uno totalmente árido y ácido.

Según los científicos, el cambio fue causado por enormes erupciones volcánicas que llenaron la atmósfera de azufre que después se precipitó sobre toda la superficie de Marte.

La última era en la que se encuentra ahora el planeta comenzó hace unos 3.500 millones de años y durante ese período los minerales se formaron sin la presencia de agua.

Una última conclusión del estudio señala que el tono rojo del planeta no se debe a la presencia inicial de agua.