¿Por qué no se cae Maduro?

El choque de trenes es inminente. La oposición armó un exitoso referéndum popular donde siete millones de venezolanos dijeron no al intento de Nicolás Maduro de imponer su constituyente, aunque igualmente la terminó haciendo.

Una constituyente a medida del autócrata, para remover de sus puestos a asambleístas de oposición. Ellos, por su lado, nombraron a sus magistrados del Tribunal de Justicia y su gobierno de transición. Ya buscan apoyo en el exterior. Maduro amenaza con encarcelar “uno a uno” a los magistrados opositores.

Desde EE.UU., Trump amenaza con acciones económicas fuertes. La mayor sería no adquirir petróleo venezolano, principal fuente de ingresos del régimen de Maduro. Otros países, como Colombia, España y México insisten en la vía del diálogo. Lamentablemente, el Ecuador navega contra corriente.

Los escenarios para salir de la crisis son inciertos. Maduro no va a dejar el poder y la pregunta que los analistas se hacen es: ¿por qué no cae? Son demasiados problemas en el país. A la escasez de productos básicos y medicinas, se suma la violencia en las calles y la represión a quienes piensan diferente.

El columnista de CNN y del Miami Herald, Andrés Oppenheimer, plantea algunas opciones. La nicaragüense, donde la comunidad internacional desconoce lo actuado por la nueva Constituyente y condiciona sus contratos petroleros, obligando a Maduro a convocar elecciones libres.

La opción egipcia prevé la toma militar del poder y nuevas elecciones, donde el peligro es que alguno de los militares tome el mando y luego se auto elija, como pasó con el general Abdel Fattah el-Sisi en 2013 y como lo intentó también Chávez.

El escenario cubano es poco tranquilizador, consolidando una dictadura a través de alianzas con Cuba, Rusia y China, con la población empobreciendo más. Los escenarios de Siria o Libia tampoco son alentadores: guerra civil, con división del territorio entre rebeldes y gobiernistas. A todo lo anterior hay que agregar que a Maduro, la canción ‘Despacito’ le sale mal, muy mal…

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