Estaba desaparecida desde el último viernes y fue hallada muerta en el sur de Quito.
El encuentro que tuvo cara a cara con la muerte hizo que José Timbila se sentara a llorar en un parque. El susto que le ocasionó encontrar el cuerpo de una mujer sin vida lo dejó en estado de shock.
Él estaba recogiendo hierba para sus animales cuando vivió la macabra experiencia.
El cadáver que halló era el de una mujer que estaba reportada como desaparecida desde el viernes de la semana pasada. Se trata de Ruth Rivera, quien trabajaba como taxista.
Carlos Rivera, padre de la víctima, dijo que su hija estaba desfigurada el rostro y que las autoridades la encontraron semidesnuda, por eso él cree que además de que fue golpeada también habría sido ultrajada por sus victimarios.
El hombre sospecha que los responsables de la muerte de su hija fueron sus propios amigos. Contó que a las 02:00 del viernes recibieron una llamada a su domicilio que los despertó.
Al otro lado de la línea hablaba una mujer quien, según Rivera, estaba en estado etílico emitiendo amenazas en contra de su hija. La situación en que se encontraba la fémina hizo que no se tomaran en serio las advertencias de atentar contra la integridad de la profesional del volante, sin embargo, durante la noche todo fue tomando forma.
La última carrera
Samuel Parreño, compañero de trabajo de la hoy difunta, indicó que el último contacto que tuvo con la víctima fue aproximadamente a las 21:20 del mismo viernes 8 de septiembre.
Ella le indicó que salía desde el norte de la urbe con una carrera hacia Quitumbe. Desde entonces perdió todo tipo de contacto.
EL DATO
Hasta ayer, el vehículo en el que trabajaba la hoy difunta no fue localizado. Los familiares de la víctima no tardaron en acudir a la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsiones y Secuestros de la Policía (Dinased) para poner la denuncia y que se asignaran agentes investigadores al caso. Los uniformados confirmaron el deceso de Rivera el último lunes por la tarde, cuando se reportó el hallazgo de su cadáver en un bosque ubicado en el barrio 18 de Octubre, en el extremo sur de Quito.
Agentes de Criminalística levantaron indicios en la escena del crimen y los restos fueron trasladados a la morgue de la Policía Nacional.
Según el protocolo de autopsia practicado a la hoy difunta, su forma de muerte fue violenta y causada por un trauma craneoencefálico debido a un golpe con objeto contundente.
La Policía ya está trabajando en la ubicación y detención de los autores materiales e intelectuales del deceso. (FLC)