Descorreizar Ecuador

Ugo Stornaiolo

Lenín Moreno no escogió mejor día, 30 de septiembre (fecha ingrata), para decir en Montecristi, a ocho años de “la Constitución de 300 años” que “se ha dado por llamar revolución a cualquier pendejada. No permitamos que el poder nos vuelva seres siniestros”.

Dos días después, sentó bases de la “descorreización”. En la segunda pregunta de la consulta quiere eliminar la reelección indefinida (aprobada por los “levantamanos”, en 2015) y en la tercera, eliminar el Consejo de Participación Ciudadana, dejando sin efecto todos sus nombramientos (procurador, fiscal, contralor, CNE, superintendentes, defensor del pueblo, entre otros).

Desmontar el andamiaje de RC será difícil. Hay que recuperar la calidad de la democracia, las libertades, la independencia de funciones del Estado y eliminar el Consejo de la Judicatura (“la metida de manos en la justicia”). Una vez que el pueblo apruebe las preguntas se debe recuperar una economía maltrecha por 10 años de manejos caprichosos. No van a la cárcel “por guayaquileños”, sino por corruptos.

Por 2.845 días RC enfrentó, insultó, humilló, denostó y denigró a supuestos contrincantes e hizo culto de un narcisismo enfermizo. Una mafia permitió la mega corrupción. Falta saber sobre los, aún no desvelados, negociados con China.

Los ejes de la consulta no tienen reparos. Se debe recuperar la institucionalidad, con muerte civil y política de los corruptos, eliminar la Ley de Plusvalía, la no prescripción de delitos sexuales contra niños/as y adolescentes y los temas ambientales.

Terminar con el lado oscuro del correísmo incluye desmontar el espionaje, la persecución y el hostigamiento, porque hay correístas enquistados en el gobierno (hasta la vicepresidenta encargada). Lo cierto es que RC no debe volver nunca más.

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