LUIS REINOSO GARZÓN
En este momento Hábitat III, seguramente ya discutió y tomo resoluciones sobre como eliminar la pobreza en este mundo cada vez más poblado, en el que casi se han agotado la mayor parte de los recursos que hacen posible la subsistencia de los seres humanos.
Actualmente se ven imágenes desgarradoras del sufrimiento de millones de niños que no disponen de un bocado de comida; pero la pobreza no solo incluye la alimentación sino además el acceso a la vivienda, al vestido y otros objetos absolutamente necesarios para mantener un funcionamiento puramente físico. Entonces estamos frente a lo que habitualmente se denomina pobreza absoluta que en poco tiempo ha desencadenado en varios países en una pobreza extrema.
El Fondo de las Naciones Unidas para las Mujeres, afirma que hay más de mil millones de personas atrapadas en la pobreza absoluta o sea 7 de cada 10 personas que mueren de hambre en el mundo son mujeres y niñas. Las mujeres también son el mayor grupo entre los denominados trabajadores pobres, que trabajan pero no ganan lo suficiente para salir de la pobreza absoluta.
Por otro lado la tasa de pobreza rural es el doble de la pobreza urbana; sin embargo, la pobreza urbana va en aumento, El alto nivel de pobreza urbana se debe a la migración de las personas de las áreas rurales hacia las áreas urbanas en búsqueda de un empleo, mejor calidad de servicios básicos y educativos. Existen diversas situaciones involuntarias que pueden llevar a un individuo a la pobreza; el desempleo, los salarios insuficientes y las catástrofes naturales, son algunas de las más frecuentes; así mismo, una enfermedad cuya recuperación exija gastos desmesurados suele ser el camino a la quiebra de muchas familias.