Museo de Pasa, un viaje hacia los ancestros de Tungurahua

Identidad. La mujer utilizaba el anaco negro, la bayeta de color azul o negro, entre otras prendas.
Identidad. La mujer utilizaba el anaco negro, la bayeta de color azul o negro, entre otras prendas.

Este sitio es la puerta de ingreso para conocer sobre la cultura y las tradiciones de una parroquia casi abandonada.

Redacción TUNGURAHUA
Entre las parroquias más antiguas de Tungurahua se encuentran Izamba, Pinllo, Quisapincha y un pueblito llamado San Antonio de Pasa.

Se trata de una zona rural de Ecuador, donde existen nueve comunidades indígenas, entre las que se destacan Mulaló, Tiliví, Pucaucho, Mogato, Punguloma y Lirio.

Este lugar posee uno de los baluartes más importantes de la provincia, como es el patrimonio arquitectónico de su iglesia, sus prácticas religiosas y la sabiduría ancestral que se complementan en un sitio que recoge una parte muy importante de su historia, arte y cultura: el museo de Pasa. Allí, cada espacio es cuidadosamente estructurado y alberga piezas únicas. Ejemplo de esto es la muestra itinerante de trajes típicos de las culturas indígenas de la provincia o las viejas máquinas de coser utilizadas por los primeros camiseros del país oriundos de este sector.

Instrumentos. El arado y las bombas de fumigación son una parte importante del museo.
Instrumentos. El arado y las bombas de fumigación son una parte importante del museo.

Secciones
El museo tiene cuatro ambientes, donde se exponen piezas arqueológicas, agrícolas y etnológicas donadas por los pobladores del sitio. También están utensilios y herramientas precolombinas del siglo XIX.

EL DATO
Según los datos que recoge este museo, el 75% de los pobladores de las nueve comunidades de Pasa son indígenas. Una de sus principales áreas es la cocina campesina, que conserva un fogón y piedras de moler donde machacaban el maíz, las habas, las arvejas, entre otros granos característicos de la parroquia. Asimismo, se observan bateas, en las cuales se realizaba la ‘pamba mesa’, explicó Elías Moreta, encargado de la administración del lugar.

La confección de las camisas es lo más representativo del centro de Pasa. Familias enteras de la urbe se dedican a este oficio, es por ello que en el museo existen máquinas de coser que datan de más de 100 años. Sin embargo, antes de ser camiseros se dedicaron a la carpintería, así elaboraron una taladora artesanal en la que se hacían las figuras.

Objetos. La cocina campesina aún se mantiene en algunas comunidades de la parroquia. En el museo se puede ver, por ejemplo, un fogón.
Objetos. La cocina campesina aún se mantiene en algunas comunidades de la parroquia. En el museo se puede ver, por ejemplo, un fogón.

Costumbres
Debido al alto valor agropecuario de las tierras de Pasa, la principal actividad económica de sus comunidades indígenas es la agricultura, mencionó Jaime Pacha, teniente político de la parroquia. Entonces, el museo también conserva el arado para la siembra, bombas de fumigación elaboradas en cobre, shigras de cabuya que servían para llevar los granos, herrajes para los caballos, entre otras cosas.

EL DATO
Este museo está ubicado en la calle Víctor Velasteguí y Rafael Arias, a una cuadra del parque central de la parroquia Pasa. La entrada no tiene ningún costo. La vestimenta de sus indígenas también están en este sitio. El hombre utilizaba un sombrero de paño o de lana de borrego color blanco, poncho rojo o negro y pantalón de chillo blanco. La mujer el anaco negro, la bayeta de color azul o negro. Por lo general ellas cargaban siempre una shigra. Actualmente los adultos mayores son quienes mantienen su vestuario. (EO)

Las primeras cerámicas
° Otro rasgo importante de Pasa son las cerámicas que antiguamente servían para almacenar los granos secos, fermentar la chicha y para transportar el agua.

Eran elaboradas en barro quemado rebuscado en las laderas de las comunidades. En la actualidad las vasijas no son tan pesadas debido al material.

Según Elías Moreta, encargado de la administración del museo, los españoles pasaban por Pasa hacia la Costa y viceversa; al realizar estos constantes viajes se intercambiaban las cerámicas. Es por ello que en el lugar existen vasijas tanto de la Costa como de la Sierra.

La población
° Pasa, al ser una de las parroquias más antiguas, fue un cacicazgo indígena por donde circulaban los españoles hasta la cordillera de los Andes, de ahí proviene su nombre según algunos pobladores del lugar.