Los achuar se mueven ahora en canoa solar

DISEÑO. La canoa solar tiene el diseño de la que usan los indígenas cofanes. Cuenta con un techo de 32 paneles solares.
DISEÑO. La canoa solar tiene el diseño de la que usan los indígenas cofanes. Cuenta con un techo de 32 paneles solares.

Se trata de un medio de transporte que aún está en prueba, pero que no destruye ni contamina el ambiente.

Redacciòn BBC, Laura Plitt

Bajo la pálida luz de un bombillo que cuelga del techo de palma de un cobertizo de madera, un círculo de hombres bebe litros y litros de una infusión de hojas preparada la noche anterior por las mujeres de la casa.

Son las cuatro de la mañana y aún falta un par de horas para que amanezca en Kapawi, una pequeña comunidad de la nacionalidad indígena achuar en un remoto rincón de la Amazonía ecuatoriana.

Los hombres beben hasta que el cuerpo les dice basta. Y uno a uno desaparecen en la oscuridad de esta noche.

Al regresar, más despiertos y energizados por la purga, comienzan a relatar e interpretar los sueños de la víspera.

El mundo onírico tiene un papel central en la vida de los achuar: no solo guía las acciones del día, sino también los planes a largo plazo, el futuro de la comunidad.

Y fue justamente en una de estas ceremonias, un ritual ancestral conocido como guayusada, que los ancianos compartieron un sueño hace más de medio siglo que acabó siendo premonitorio: por las aguas marrones del río vieron bajar ‘un barco de fuego’. Mito o historia genuina, lo cierto es que esta visión se ha transformado recientemente en una realidad para un grupo de comunidades achuar.

Desde abril de 2017, una canoa impulsada por energía solar recorre 67 km a lo largo de los ríos Capahuari y Pastaza y comunica entre sí a unas 1.000 personas repartidas en nueve asentamientos aislados que viven en sus márgenes.

ESTUDIOS. Desde que viajar es más económico, un dólar por persona y estudiantes un precio reducido, existen más alumnos inscritos en la escuela.
ESTUDIOS. Desde que viajar es más económico, un dólar por persona y estudiantes un precio reducido, existen más alumnos inscritos en la escuela.

En busca de armonía
La canoa se llama Tapiatpia, en honor a un legendario pez eléctrico de la zona, y es el primer sistema fluvial comunitario solar de la Amazonía. Este modelo de transporte sostenible que recorre el territorio por sus rutas ancestrales, los ríos, no solo materializa un antiguo sueño, también responde al deseo profundo de esta cultura de vivir en armonía con el medioambiente.

Aún está en su etapa inicial. Pero si resulta exitoso, tiene el potencial de implementarse en otros ríos de la cuenca amazónica, un ecosistema amenazado por la deforestación, la explotación petrolera y la minería y de cuyo futuro depende el clima del planeta. “La canoa solar es una solución ideal para este lugar porque aquí hay una red de ríos navegables interconectados y una gran necesidad de transporte alternativo”, explicó a BBC Mundo Oliver Utne, el cooperante estadounidense que le dio vida al proyecto Kara Solar (Kara significa sueño en achuar), después de convivir con la comunidad durante años.

“Como la gasolina solo puede llegar hasta aquí por avioneta, cuesta hasta cinco veces más que en el resto del país”, indica. Eso la convierte en un lujo que no todos pueden darse. “Por otra parte, la amenaza de la llegada de las carreteras a este territorio, uno de los lugares con mayor biodiversidad del mundo, está muy presente”. “Traerlas hasta aquí significaría la destrucción de esta biodiversidad y produciría un impacto muy fuerte en estas culturas”, argumenta este joven de poco más de 30 años que los achuar tratan como a uno más de la familia.

AVISTAMIENTOS. Desde la canoa, Hilario Saant puede avistar a los animales que se esconden en la selva. Siempre está atento.
AVISTAMIENTOS. Desde la canoa, Hilario Saant puede avistar a los animales que se esconden en la selva. Siempre está atento.

Un transporte fusión
Con un techo de 32 paneles solares montados sobre una canoa tradicional de 16 m de largo y 2 de ancho, Tapiatpia encarna la fusión de la tecnología moderna con el conocimiento ancestral.

Hecha con fibra de vidrio en vez de madera para extender su vida útil, la embarcación tomó prestado su diseño de la nave típica de los indígenas cofanes del norte del país.

Después de varios estudios de navegabilidad resultó ser el modelo que mejor se adapta a las condiciones amazónicas. Las rutas, los horarios, el puerto central y otros asuntos relativos a su funcionamiento fueron decididos por las propias comunidades, con ayuda de Plan Junto, una organización que se encarga del aspecto comunitario del emprendimiento. (Fotos: BBC)

Más alumnos en las aulas
° De pie en la popa del Tapiatpia, con los ojos puestos en la ruta y los oídos en la conversación, Hilario Saant cuenta orgulloso cómo poco a poco la canoa les está cambiando la vida.

“Estamos ayudando a la comunidad cuando hay niños enfermos. Me llaman por radio y llevamos a los niños al centro de salud.

Tapiaptia ayuda a salvar vidas”, cuenta emocionado.

Saant fue uno de los cuatro tripulantes que hicieron el épico viaje de 1.800 km durante 25 días para traer la canoa desde el lejano puerto de Iquitos, en Perú, hasta el territorio achuar.

“Ahora los niños pueden hacer paseos escolares”, continúa Saant. “Y si viven lejos, tienen la posibilidad de ir a la escuela y regresar el fin de semana a ayudar a sus papás”.

De esto es testigo Mateo Tseremp, maestro de la única escuela secundaria para 15 comunidades en la zona, quien ha visto un marcado incremento en el número de alumnos.

“Nos ayuda a traer más estudiantes a la unidad educativa Tuna. Esto es mucho más económico”, dice durante una pausa después de la lección.

Ropa por plátanos verdes
° En Suwa, una población de un centenar de familias, el dirigente del Territorio de la Nacionalidad Achuar del Ecuador, Julián Ilanes, habla de otras oportunidades que podrían explorarse en un futuro cercano.

Se refiere al restablecimiento de la comunicación con los achuar de Perú (se estima que allí hay unos 12.000 mientras que en Ecuador son alrededor de 7.000). Unidos por un lenguaje y cosmovisión comunes, quedaron separados por las guerras territoriales entre ambos países que militarizaron a la población indígena. El interés por reanudar este vínculo, señala, es crear lazos comerciales. “Hay productos básicos de la zona que se pueden transportar. Podemos traer ropa y caucho desde Perú. Y ellos necesitan plátanos verdes, pollo, maní…”, dice.

Sin embargo, más allá de las ventajas económicas de un transporte de bajo costo para estas comunidades, un beneficio que ellos consideran crucial es que esta nave no destruye ni contamina el medio ambiente.