Hacen falta explicaciones

Rosalía Arteaga Serrano

Hay unos cuantos casos que han saltado a la luz pública en los últimos días y que realmente nos sublevan, a manera de gota que rebosa el vaso y que nos dicen que ya no podemos tolerar más, que la paciencia ciudadana se agota. Hacen falta explicaciones convincentes y medidas de reparación inmediatas.

Empezaremos por el escándalo sacado a la luz por el periódico inglés The Guardian, que revela que el gobierno ecuatoriano gastó cinco millones de dólares en espionaje en el caso Julian Assange, a quien se lo mantiene todavía en la embajada en Londres.

Necesitamos explicaciones puntuales sobre a quiénes se espiaba y para qué. Son dineros públicos que provienen de los impuestos que pagamos los ecuatorianos y que el régimen debe manejar con transparencia e informando a quienbes los proveen, es decir, los ciudadanos.

Nos enteramos de la muerte de una niña. Necesitamos saber qué pasó exactamente con la niña de un colegio de Guayaquil, duyo dxeceso aparentemente se produjo después de recibir golpes y ser maltratada por otros estudiantes.

Varios ministros de Estado fueron convocados. Necesitamos saber por qué la Ministra de Relaciones Exteriores no compareció ante la Asamblea Nacional a rendir cuentas de sus acciones en los casos de secuestro y violencia ocurridos en la frontera norte.

Son algunos de los interrogantes últimos que merecen respuesta de las autoridades pertinentes, así como que se dé inicio a la aplicación de sanciones a quienes están inmersos en estos temas y son responsables de tantos errores y desafueros.

Y yo diría que, además de las explicaciones, se requieren inciciar y continuar juicios, la reposición de dineros malhabidos y, algon esencial, trabajar por el restablecimiento de la fe pública en las instituciones.

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