En las personas de entre 12 y 35 años la pérdida de la audición va en aumento. Esto debido al uso indiscriminado de los audífonos.
Al igual que la vista y la dentadura, que requieren de revisión médica por los especialistas por lo menos una vez al año, la audición también necesita del mismo tratamiento.
Investigaciones señalan que, aún siendo los adultos mayores la población con más incidencia de pérdidas auditivas, en los jóvenes, de entre los 12 y 35 años, esta deficiencia está aumentando (1.100 millones de jóvenes) por el uso indiscriminado de audífonos en volúmenes altos y por tiempos prolongados.
Lo recomendable, de acuerdo con la otorrinolaringóloga Paola Freire, es el uso de auriculares, de preferencia los de tipo diadema, mínimo dos horas al día y con el volumen a la mitad de la regulación que tiene cada equipo.
La experta y especialistas del Centro audiológico ‘Oír Bien’ realizarán hasta el 29 de este mes, y por quinto año consecutivo, la campaña gratuita de audiometrías en Quito y Guayaquil para personas a partir de los 5 años.
Causas
En el caso de los adultos mayores, a partir de los 50 años, la pérdida auditiva (presbiacucia) es normal. Y en la mayoría de los casos se aconseja el uso de dispositivos para detener esta problemática, recuperar la audición y no esforzar al oído que no ha sufrido una merma.
EL DATO
Para el año 2050, más de 900 millones de personas en el mundo padecerá algún grado de pérdida auditiva. (OMS)Pero también hay causas genéticas, afirma Freire. Complicaciones en el parto, bebés con bajo peso al nacer o asfixia en el nacimiento; mujeres embarazadas que tengan rubéola, sífilis, cytomegalovirus… afectan a la audición del recién nacido. Asimismo, existen factores adquiridos, que pueden ser infecciosos y que terminan en pérdidas de la audición, como la falta de tratamiento adecuado en el caso de otitis media (inflamaciones del tímpano).
Algunos medicamentos, como los aminoglucósidos y los antipalúdicos, pueden provocar una sordera irreversible.
Prevención
TOME NOTA
Consultas gratuitas previa cita, llamando a:
02 2 331 70 88 / 02 224 65 34 en Quito.
04 210 72 84 en Guayaquil.En las audiometrías, indica la experta se utiliza un equipo que permite determinar si existe algún tipo de pérdida de la audición o alguna otra situación que está evitando que la persona pueda desarrollar normalmente su vida. Este examen ayuda a detectar a tiempo la pérdida auditiva y detener su progresión con procedimientos adecuados, como el uso de audífonos, implantes cocleares y otros dispositivos. Lamentablemente, dice Freire, el 5% de la población ecuatoriana (entre 700 y 900 mil personas) tiene pérdida auditiva de moderada a grave y muchos no saben.
Cifras
Según la Organización Mundial de la Salud, en 2050 más de 900 millones sufrirán pérdida de audición discapacitante. El organismo aclara que la prevención, detectar y tratar la pérdida de audición no son caras y pueden resultar muy beneficiosas para los interesados. (CM/PT)
Síntomas y más detalles
° La otorrinolaringóloga Paola Freire señala algunas formas de detectar la pérdida de audición: En los niños cuando hay déficit de lenguaje, cuando están distraídos en las clases o cuando no rinden académicamente. En los adultos cuando existe secreción, sangre, pus, picazón o dolor en los oídos. En adultos mayores cuando piden que les repitan las frases, cuando giran la cabeza para tratar de escuchar por el oído sano, ponen el volumen alto o hablan fuerte o gritan.
Según la OMS, el 60% de los casos de pérdida de audición en niños se debe a causas prevenibles. Además, indica que los cuadros desatendidos representan un costo mundial anual de 750.000 millones de dólares.
Problemas frecuentes
° El tapón de cera (que cierra el conducto auditivo y hace que la audición disminuya) y las otitis externas son los problemas más frecuentes en el medio ecuatoriano, manifiesta la otorrinolaringóloga Paola Freire.
La cera, explica, es una secreción normal, pero el exceso puede ocasionar un taponamiento que se soluciona con un lavado que deben realizar médicos profesionales. Este procedimiento es recomendable hacerlo por lo menos dos veces al año.
En cuanto a las otitis externas, indica que se producen por estar en prolongado contacto con agua de piscina, playa o contaminada. Si no recibe tratamiento adecuado puede terminar en un caso extremo hasta en meningitis o en algún absceso cerebral (problema neurológico).
Para una limpieza de los oídos en casa, la experta recomienda pasar una toalla húmeda por la oreja sin introducir en el conducto auditivo. También prohíbe el uso de cotonetes, porque estos empujan la cera y así se da paso a la formación del tapón.