‘La casa de las flores’, la nueva moda de Netflix

ELENCO. Verónica Castro (centro) es parte de la familia ‘De la Mora’, protagonista de la serie.
ELENCO. Verónica Castro (centro) es parte de la familia ‘De la Mora’, protagonista de la serie.

La producción integrada por un elenco mejicano, se abre paso a ser la nueva serie favorita del verano.

Apenas y ha pasado un mes del final de ‘La serie de Luis Miguel’ y parece que Netflix ya tiene quien llene el vacío que dejó Luisito Rey. Se trata de ‘La casa de las flores’, una producción original de la popular plataforma web de seriados y películas.

Dirigida por el joven cineasta mejicano de 33 años Manolo Caro, esta producción cuenta con la notable participación de la diva de las telenovelas ochenteras, Verónica Castro, quien le da un giro a su clásica actuación ‘telenovelezca’ con la que tenía acostumbrado a sus fanáticos. Castro se muestra con un aire más relajado y tragicómico, acorde a las exigencias actorales actuales que distan mucho de los personajes acartonados de Televisa o Emilio Larrosa.

“Manolo Caro, el director de las películas de nombres extensos como ‘No sé si cortarme las venas o dejármelas largas (2013)’ o ‘La vida inmoral de la pareja ideal (2016)’ ha logrado que su serie se haga viral con personajes bien logrados y un guion capaz de enganchar”, comenta en un artículo la crítica de televisión peruana Esther Vargas.

Arriesgada y relajada
La familia protagonista de este estreno de Netflix es adinerada y próspera, con una ideología bastante conservadora y de apariencias que poco a poco serán derruidas por lo que se les viene.

Sin ánimo de hacer ‘spoilers’ o de contar el final, el gancho principal es el mero contraste de una vida lineal contra un hecho que romperá toda normalidad.

Los padres de la casa: Arturo Ríos (Ernesto de la Mora) y una ‘maligna’ Verónica Castro (Virginia de la Mora), son la cabeza de un negocio floral que, aunque sea poco verosímil, les ha dado dinero suficiente para vivir en un enorme caserío, a lo Beverly Hills, con autos de lujo y todas las comodidades posibles.

Ellos mantienen a una de sus hijas en Nueva York, interpretada por la actriz Aislinn Derbez y a otros dos en México, representados por Darío Yazbek Bernal (hermano de Gael García Bernal en la vida real), y Cecilia Suárez.

Un hecho trágico hará que todo cambie para esta familia… en realidad es un suicidio, pero eso ocurre al principio y es necesario para que se desencadene la trama.

“Una madre de familia de lo más seria que se pachequea (se droga) sin tregua y acaba por coquetear con un narcomenudeo casero, un hijo con hábitos rigurosamente bisexuales, travestis, estrípers, en un tono que va y viene entre el melodrama mexicano ‘old school’ y una comedia también muy de nuestras tradiciones (mejicanas), pero emparentada con la nueva televisión como nos llega de Estados Unidos, esa siempre ácida, no ajena al humor negro”, describe el periodista Julio Patán en la plataforma Milenio, acerca de esta producción.

La historia de ‘La casa de las flores’ se desenvuelve en medio de varias temáticas, como el consumo de drogas y la diversidad sexual, algo que las mentes más conservadoras aún observan con temor y asombro pero que son la pólvora perfecta para que explote el debate entre quienes se escandalizan por un beso entre dos hombres o por ver por primera vez al personaje de Verónica Castro fumarse un ‘porro’ (cigarro) de marihuana.

Hay más personajes interesantes, pero esos los tendrá que descubrir el espectador, no queremos que esta nota sea un conglomerado de adelantos no deseados. (CC)