Rocío Erazo Benavides
Es una palabra que va teniendo coherencia, que es la unión de dos o más cosas diferentes formando una sola. El deseo de volver a rescatar saberes y sabores ancestrales, donde la organización, la alimentación, son algunos de los ejes fundamentales para integrar el bienestar físico, emocional y financiero en la vida cotidiana de cada ser.
Por ejemplo, la semana anterior presencié el Encuentro de Actores de la Economía Popular y Solidaria, en donde las experiencias: de las finanzas populares y Solidarias, de la Asociatividad en la Producción, de Cajas de Ahorro y Crédito, de comercialización con rostro humano, se forjó y resultó una gran fusión organizacional, donde se integraron cajas de ahorro en un solo cuerpo, como Cooperativa de Ahorro y Crédito “Rural Sierra Norte”, y una de las personas que acompaña este proceso con gran visión como la Ing. Dennys Pisango, manifestó que es la hora de fusionarse: las cajas de ahorro, juntas parroquiales y autoridades como los municipios, para conseguir desarrollo.
En hora buena¡ y felicidades a todas estas organizaciones que dejaron diferencias e intereses personalistas para pensar en grande y comprender que es fusión. Así también debemos saber que también existen organizaciones multinacionales que han comprendido que la fusión, es ideal, y de ahí hoy existe la fusión nutracéutica, que se trata de una “filosofía de trabajo que busca recuperar los conocimientos ancestrales de milenarias culturas andinas, amazónicas, mesoamericanas y asiáticas en el uso de alimentos como medicina y fusionarlos con los últimos avances de la biotecnología aplicada a la nutrición humana para potenciar tu salud y tus capacidades”.
Un cuerpo en salud promueve una mejor vida. Esta fusión nutracéutica utiliza más de 1.500 principios activos extraídos de alimentos naturales y combina nutrientes específicos frutales y vegetales que hacen sinergia y se potencian, multiplicando sus beneficios. El bienestar físico, emocional y financiero, es el eje.