Cuestión de vida

MA. ALEJANDRA SALAZAR MURRIETA

No es novedad para ningún esmeraldeño, que aquellos fuertes olores que se perciben durante el transcurso del día provienen de la refinería y de la termoesmeraldas; ya a nadie le extraña la fuente de donde emanan, es más, la mayoría de las personas al hablar del tema, dirigen su mirada hacia ese punto de la ciudad en donde se ubican esas industrias estatales.

Los gases que son lanzados al aire de forma inmisericorde, están causando graves afectaciones a la salud; no es raro conocer de alguien que padece alguna enfermedad crónica respiratoria, o de casos cada vez más frecuentes de muertes ligadas a algún tipo de cáncer. Se conoce que uno de los gases al que estamos expuestos es el azufre, pero desconocemos el impacto que éste tiene sobre la población.

Por tanto, es menester que las autoridades acudan en auxilio del clamor de la ciudadanía y pidan cuentas sobre el manejo ambiental o sobre los planes de remediación o prevención que asumo debe estar ya establecido por estas instituciones, que es cierto que generan fuentes de empleo y dejan al erario ingentes cantidades de dinero, pero no por ello el pueblo puede ser olvidado y abandonado a su suerte.

No es posible que nuestros gobernantes pretendan mirar hacia otro lado y aduzcan desconocimiento de lo que nos ocurre, cuando deben recordar que tanto ellos como sus familias respiran el mismo aire contaminado y que las enfermedades y la muerte no miran tiendas políticas.

La salud debe ser una prioridad de estado y son nuestras autoridades las que deben asumir la misión de darnos una solución. Sino que al menos realicen un pequeño cálculo y analicen que si la población muere o se enferma no habrá quien vote por ellos.

Es menester que nos den respuestas, porque a estas alturas garantías de que nos darán salud es más que imposible; pero saber, al menos, qué está ocurriendo y conocer si existe manera de evitar mayores afectaciones es de vital importancia, de no ser así ya no será una cuestión de vida, será una cuestión de muerte.

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