La punta del iceberg II

En el artículo anterior hacíamos relación a la punta del iceberg con los escándalos de corrupción en la década infame del correísmo que siguen apareciendo. Escribimos sobre los varios negociados petroleros que se hicieron, las compras de ambulancias, compra de los famosos helicópteros Dhruv, contratos con sobreprecios en carreteras, medicinas, etc.

Y lo más preocupante es que hay alrededor de 35 crímenes sin aclarar vinculados a la denuncia de corrupción y protesta en el gobierno de Correa, entre las que se puede mencionar varias muertes misteriosas como la del general Jorge Gabela, del periodista Fausto Valdivieso, Quinto Pazmiño y esposa; los militares Froilán Jiménez, Jacinto Cortez, Juan Pablo Bolaños, Darwin Panchi; los indígenas Bosco Wisuma, José Tendetza; Juan Paúl Flores, vinculado con la “narcovalija”, etc., etc.

El caso del secuestro del político Fernando Balda que parece que se va a convertir en la horma del zapato del expresidente Rafael Correa, pues habría pruebas fehacientes de que él fue el autor intelectual del secuestro.

Ante tanta corrupción y desafuero de la década infame, para desahogarme un poco de esta impotencia que siento, no queda más que compartir esta elegía a la corrupción, lamentando las ilusiones perdidas que nos ha causado el correísmo:

En Ecuador hay tragedia: todo se vuelve corrupción. / Corrupción, esta sangre que me pica como ortiga. / Corrupción, esta parálisis desenfrenada que todas las auroras tiñen de coágulos. / Corrupción, evidencia mis poros oscuros y mis venas abiertas desangrándose. / Corrupción, ambrosía que beben los corruptos. / Corrupción, el limbo donde descansan las denuncias contra funcionarios corruptos. / Corrupción, el nirvana donde no se castigan a los corruptos. / Corrupción, el eterno salto mortal de mi pueblo hacia el abismo.