La farsa de la paz

En abril de 1985, Gabriel García Márquez dio a conocer sus opiniones sobre el Gobierno del entonces presidente Belisario Betancur, y vaticinó que la guerra en Colombia no se iba a acabar con las negociaciones que el mandatario adelantaba con las guerrillas. El premio Nobel de Literatura estaba convencido de que el obstáculo para la paz no era la guerrilla, sino la violencia política y la poca buena fe del Gobierno.

Ahora el acuerdo definitivo de paz con la guerrilla de las FARC cumple dos años de firmado, pero con muchas dificultades para su implementación, y con un crecimiento de la violencia en las mismas regiones donde estaba la guerrilla. Cuando Juan Manuel Santos, y el líder de las FARC, Rodrigo Londoño, conocido como “Timochenko”, firmaron el acuerdo, supuestamente con ello se dio fin a más de medio siglo de confrontación armada.

Entonces, más de 7.000 guerrilleros dejaron las armas e iniciaron su tránsito a la vida civil, pero enseguida, al menos 3.000 de ellos, se juntaron a grupos disidentes. Dos años después, las comunidades carecen de garantías fundamentales y persiste el asesinato de líderes sociales y la confrontación con el ELN.

Por supuesto que lograr la paz no es fácil, pero el principal reto de Colombia es incrementar la presencia de las instituciones para llevar a los territorios los dividendos de la paz, como lo son seguridad, educación, salud, tierra, infraestructura y oportunidades alternativas de desarrollo. Y de paso, claro, proteger mucho más la frontera con Ecuador, que buena falta hace.


Si todo el mundo demandase paz en lugar de otro programa de
televisión, entonces habría paz”. John Lennon. Músico y compositor inglés (1940-1980)Es la búsqueda de la verdad, no la posesión de la verdad lo que da valor a la filosofía”. Karl Theodor Jaspers. Psiquiatra y filósofo alemán (1883-1969)