Se dice que este cánido (mamífero carnívoro) habita entre los 2.600 a 4.500 metros sobre el nivel del mar, donde encuentra sitios para esconderse, porque es tímido y evita el contacto con los seres humanos.
Según información proporcionada en la página www.bioweb.bio, este animal vive únicamente en Sudamérica y se distribuye desde el sureste de Colombia, Ecuador, Perú, el altiplano de Bolivia hasta Chile y Argentina.
En Ecuador se encuentra en bosques templados húmedos y páramos andinos, como la Reserva Ecológica Antisana o la zona subtropical alta del río Guayllabamba, al noroccidente de Quito. Aunque es un animal generalista, se adapta a las condiciones del hábitat que le proporcione abundancia.
Es por esta característica que se lo puede encontrar en estepas áridas, matorrales, áreas boscosas, bosques nativos, fragmentados, reforestados, montanos y de páramo. (CM)
Imponente apariencia
Un adulto puede medir hasta 1,70, incluyendo su cola. Está cubierto por un largo y espeso pelaje blanco en su abdomen y cuello. Su rostro, con cabeza y hocico anchos, tiene apariencia triangular. Las orejas son grandes, rectas y triangulares.
Alimentación
Un estudio realizado a las heces de lobos en zonas alto andinas de Zamora Chinchipe, demostró que se alimentan de ungulados, roedores grandes, pequeños mamíferos, musarañas, zorrillos, zarigueyas, coatis, conejos.
Socializan en época de reproducción
Son animales solitarios. Cuando se juntan con una hembra es solo para reproducirse. Llegan a la madurez sexual, hembras y machos, a partir del primer año de edad. En época de celo, varios machos se reúnen en torno a la hembra, lo que puede generar peleas sangrientas entre los lobos machos para definir cuál copulará con la hembra.
Reproducción
Cuando la hembra queda preñada, pasarán entre 55 a 60 días para parir tres o seis cachorros que, en sus primeros días, pesan 66 gr y miden 165 mm. A los siete meses alcanzan el tamaño de un adulto. En etapa de maternidad, el macho les provee de alimento.