Por más que nos lamentemos, que rasguemos nuestras vestiduras y nos echemos ceniza en los cabellos, Ecuador está rezagado en cuanto a desarrollo económico respecto a varios países de la región que, hace cinco años, tenían niveles semejantes al nuestro. Se desperdició el segundo boom de los precios de los recursos naturales, no se manejaron bien los ingresos obtenidos entonces.
Eso dijo el Presidente del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF). “Si consideramos que el crecimiento del PIB per cápita real se mantenga en el 1%, le tomaría al Ecuador 70 años llegar al nivel que tiene Chile hoy”, añadió en un encuentro organizado por la Secretaría General Iberoamericana y CAF. Para alcanzar a Portugal se requieren 104 años.
Se podría conjeturar que el camino escogido ahora para el desarrollo económico es correcto, pero insuficiente. Falta por despojar a la política de no pocos lastres populistas recibidos de la década correísta. Uno de ellos, por ejemplo, es la persistencia de la corrupción, dado que aún son muchos sus beneficiarios ocultos.
¿Cuánto ha costado y nos sigue costando la corrupción? El estilo depredador de política en nuestro medio es el primer obstáculo para saberlo. La búsqueda de la verdad en estas circunstancias es lo que se sacrifica en la hoguera populista. Mientras, se incrementa la desigualdad, se distorsiona la política, se afecta la competitividad y la inversión y se impide la libre competencia. Alcanzar a Chile y a Portugal, en un plazo razonable, es otra “misión imposible”.
El colmo de la estupidez es aprender lo que luego hay que olvidar”. Erasmo de Rotterdam Humanista neerlandés (1469-1536)
Para enseñar a los demás has de hacer tú algo muy duro: enderezarte a ti mismo”. Buda. Fundador del budismo (563 AC-486 AC)