La “década ganada”, exclusivamente por el correísmo y sus seguidores, puso al Banco Central de Ecuador contra las cuerdas. Le quitó funciones y lo convirtió en un apéndice de su política económica, en la que, dicho sea de paso, no tenía voz y mucho menos votos. Recuperar la autonomía que entonces le quitaron es un gran paso hacia un manejo serio de la economía, así como dar cuenta precisa de las reservas nacionales.
La medida es parte de los acuerdos que el país ha suscrito con el Fondo Monetario Internacional. Se prepara un proyecto de ley que deberá ir a la Asamblea Nacional y que permitirá, si se aprueba, a la opinión pública y a los especialistas saber en verdad cómo está la economía, sus problemas y perspectivas con cifras creíbles ajenas a la tendencia política del gobierno de turno.
Para la gerente del Banco Central, la recuperación de la autonomía es vital para que la institución efectúe un manejo técnico e independiente y contribuya a mantener el sistema de dolarización que rige en Ecuador. Señaló la funcionaria que con el Código Orgánico Monetario y Financiero impuesto por Correa en 2014, “el Banco no es independiente, debido a que sus decisiones están supeditadas a los dictados del Ejecutivo”,
Correa, con desprecio, tildó a los economistas que no compartían su visión del asunto como “meros contadores”. La experiencia que nos dejó fue de una irresponsable indisciplina en el manejo de los recursos financieros públicos. Es decir, en ese entonces al país le faltaron contadores en el gobierno de su economía, una profesión digna y, por ello, necesaria. Parece que estamos volviendo a la razón, después de tanta irracionalidad.
Si debes equivocarte, hazlo por el lado de la audacia”. Sue Monk Kidd Escritora estadounidense (1948)
Nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis”. Michel de Montaigne Escritor y filósofo francés (1533-1592)