Vulneraciones contra animales se juzgarían como delitos de acción privada

SITUACIÓN. En Quito se calcula que hay un perro abandonado por cada 22 personas.
SITUACIÓN. En Quito se calcula que hay un perro abandonado por cada 22 personas.

En caso de que las reformas al Código Integral Penal (COIP) pasen el veto presidencial tal como están en el proyecto aprobado esta semana por la Asamblea Nacional, cuatro vulneraciones a los animales, considerados dentro del grupo de fauna urbana, pasarán a ser delitos de acción privada. Entre esos están las lesiones, el abuso sexual, el asesinato y cualquier tipo de organización o entrenamiento para peleas o combates. Todos serán penados con condenas desde dos meses hasta tres años de prisión.

Adicionalmente, se considerarán como contravenciones sancionadas con horas de trabajo comunitario al abandono y al maltrato. A pesar de que desde hace varios años, organizaciones animalistas han pedido que estos crímenes se tipifiquen y se penalicen con cárcel, lo que le preocupa ahora a la fundadora de Distrito Animal, Nathaly Toledo, es la forma en la que se han incluido estas reformas.

Para ella, es un gran retroceso que sean delitos de acción privada, pues esto implicaría que como, según la Ley, no son de gravedad ni afectan al orden público, es el denunciante el que tiene que encargarse de todos los procesos y no intervendrían, en ningún momento, las instituciones estatales encargadas de la investigación como la Fiscalía. Al respecto, la asambleísta de Alianza País, Soledad Buendía, también se manifestó en contra y mencionó que una vez que el COIP se publique se pedirá una reforma.

En territorio

Otra de las falencias que identifica Toledo es que hay temas que quedan a la interpretación; como la delimitación de los animales que forman parte de la fauna urbana, tomando en cuenta que en cada provincia hay dinámicas distintas. La activista cuestiona también que no se haya usado el término zoofilia (conducta sexual de perversión hacia los animales) en la reforma y en su lugar se haya escrito “abuso sexual”.

Según una investigación que realizó su fundación, en Guayaquil, 1 de cada 4 personas ha provocado algún tipo de maltrato a su mascota y el 68% de mujeres maltratadas denunciaron que vieron a su agresor hacer daño a un animal. Por eso, Toledo menciona que es importante que esas conductas sean sancionadas, pero de una forma accesible que ayude a evitar otros tipos de violencia.

En el país, Quito, Guayaquil, Cuenca, Latacunga y Riobamba son algunas de las ciudades que tienen ordenanzas con respecto al manejo de fauna urbana. El docente universitario, César Mantilla, explica que para que las reformas se apliquen en territorio, primero es importante que entren en vigencia y luego se determinen las competencias de cada Municipio. Por ejemplo, dice que en los casos en los que se dispone que se retire al animal de su dueño, las municipalidades deberán implementar algún tipo de refugio.

Mantilla, quien fue secretario de Inclusión de Quito, menciona que las reformas sí son un avance pues antes estos crímenes eran equiparables a las infracciones de tránsito. Para él, es destacable que ahora haya coherencia con el enfoque de interdependencia del ser humano con su entorno y que los delitos deban ser comprobados antes de la sanción. El experto señala que entre las buenas prácticas que implementó la capital está la inclusión de un representante de animales y naturaleza en el Consejo Consultivo. (PCV)

SITUACIÓN. En Quito se calcula que hay un perro abandonado por cada 22 personas.
SITUACIÓN. En Quito se calcula que hay un perro abandonado por cada 22 personas.