No podría haber mayor desgracia

Se cuentan por decenas los heridos de ambas partes, tanto de los protestantes como de la Policía. Hay periodistas retenidos. También se habla muertos. En unos y otros el discurso se vuelve cada vez más intolerante. La violencia comienza a dar sus frutos de odio y resentimiento. En diversos escenarios mediáticos se libra una batalla por posicionar acuerdos y desacuerdos.

Como quiera que se mire el enredo en que nos han metido a la mayoría de ecuatorianos es sumamente grave, pues compromete el futuro de varias generaciones. El problema fundamental, en el fondo, es que la mayoría de los ciudadanos estamos sometidos a la voluntad de varias organizaciones indígenas, sociales y sindicales, que hablan y actúan en nuestro nombre.

Los gloriosos bravucones tienen al país en vilo. El envilecimiento del espacio público de comunicación por insultos, calumnias, hostigamientos denigratorios y noticias falsas, ahora tiene serias consecuencias sociales y políticas. Las opiniones no son armaduras para encerrarse y defenderse del resto del mundo. Las realidades deben pesar por encima de ellas. La económica del Ecuador, por donde se la mire, es desalentadora.

El diálogo entre las partes y la intervención, para procurarlo, de las iglesias y la ONU, no se hace visible. La incertidumbre y el desánimo campean por sus respetos. Toma cuerpo la idea de que estamos hundidos en un proceso conspirativo que pugna por desembocar en un golpe de Estado. Su costo sería el destrozo y pisoteo de la democracia. Con su hundimiento se irán las posibilidades de cambio. No podría haber desgracia mayor.


Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia. Mahatma Gandhi Político y pensador indio (1869-1948)La violencia es miedo de las ideas de los demás y poca fe en las propias”. Antonio Fraguas Forges Humorista español (1942-2018)

Se cuentan por decenas los heridos de ambas partes, tanto de los protestantes como de la Policía. Hay periodistas retenidos. También se habla muertos. En unos y otros el discurso se vuelve cada vez más intolerante. La violencia comienza a dar sus frutos de odio y resentimiento. En diversos escenarios mediáticos se libra una batalla por posicionar acuerdos y desacuerdos.

Como quiera que se mire el enredo en que nos han metido a la mayoría de ecuatorianos es sumamente grave, pues compromete el futuro de varias generaciones. El problema fundamental, en el fondo, es que la mayoría de los ciudadanos estamos sometidos a la voluntad de varias organizaciones indígenas, sociales y sindicales, que hablan y actúan en nuestro nombre.

Los gloriosos bravucones tienen al país en vilo. El envilecimiento del espacio público de comunicación por insultos, calumnias, hostigamientos denigratorios y noticias falsas, ahora tiene serias consecuencias sociales y políticas. Las opiniones no son armaduras para encerrarse y defenderse del resto del mundo. Las realidades deben pesar por encima de ellas. La económica del Ecuador, por donde se la mire, es desalentadora.

El diálogo entre las partes y la intervención, para procurarlo, de las iglesias y la ONU, no se hace visible. La incertidumbre y el desánimo campean por sus respetos. Toma cuerpo la idea de que estamos hundidos en un proceso conspirativo que pugna por desembocar en un golpe de Estado. Su costo sería el destrozo y pisoteo de la democracia. Con su hundimiento se irán las posibilidades de cambio. No podría haber desgracia mayor.


Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia. Mahatma Gandhi Político y pensador indio (1869-1948)La violencia es miedo de las ideas de los demás y poca fe en las propias”. Antonio Fraguas Forges Humorista español (1942-2018)

Se cuentan por decenas los heridos de ambas partes, tanto de los protestantes como de la Policía. Hay periodistas retenidos. También se habla muertos. En unos y otros el discurso se vuelve cada vez más intolerante. La violencia comienza a dar sus frutos de odio y resentimiento. En diversos escenarios mediáticos se libra una batalla por posicionar acuerdos y desacuerdos.

Como quiera que se mire el enredo en que nos han metido a la mayoría de ecuatorianos es sumamente grave, pues compromete el futuro de varias generaciones. El problema fundamental, en el fondo, es que la mayoría de los ciudadanos estamos sometidos a la voluntad de varias organizaciones indígenas, sociales y sindicales, que hablan y actúan en nuestro nombre.

Los gloriosos bravucones tienen al país en vilo. El envilecimiento del espacio público de comunicación por insultos, calumnias, hostigamientos denigratorios y noticias falsas, ahora tiene serias consecuencias sociales y políticas. Las opiniones no son armaduras para encerrarse y defenderse del resto del mundo. Las realidades deben pesar por encima de ellas. La económica del Ecuador, por donde se la mire, es desalentadora.

El diálogo entre las partes y la intervención, para procurarlo, de las iglesias y la ONU, no se hace visible. La incertidumbre y el desánimo campean por sus respetos. Toma cuerpo la idea de que estamos hundidos en un proceso conspirativo que pugna por desembocar en un golpe de Estado. Su costo sería el destrozo y pisoteo de la democracia. Con su hundimiento se irán las posibilidades de cambio. No podría haber desgracia mayor.


Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia. Mahatma Gandhi Político y pensador indio (1869-1948)La violencia es miedo de las ideas de los demás y poca fe en las propias”. Antonio Fraguas Forges Humorista español (1942-2018)

Se cuentan por decenas los heridos de ambas partes, tanto de los protestantes como de la Policía. Hay periodistas retenidos. También se habla muertos. En unos y otros el discurso se vuelve cada vez más intolerante. La violencia comienza a dar sus frutos de odio y resentimiento. En diversos escenarios mediáticos se libra una batalla por posicionar acuerdos y desacuerdos.

Como quiera que se mire el enredo en que nos han metido a la mayoría de ecuatorianos es sumamente grave, pues compromete el futuro de varias generaciones. El problema fundamental, en el fondo, es que la mayoría de los ciudadanos estamos sometidos a la voluntad de varias organizaciones indígenas, sociales y sindicales, que hablan y actúan en nuestro nombre.

Los gloriosos bravucones tienen al país en vilo. El envilecimiento del espacio público de comunicación por insultos, calumnias, hostigamientos denigratorios y noticias falsas, ahora tiene serias consecuencias sociales y políticas. Las opiniones no son armaduras para encerrarse y defenderse del resto del mundo. Las realidades deben pesar por encima de ellas. La económica del Ecuador, por donde se la mire, es desalentadora.

El diálogo entre las partes y la intervención, para procurarlo, de las iglesias y la ONU, no se hace visible. La incertidumbre y el desánimo campean por sus respetos. Toma cuerpo la idea de que estamos hundidos en un proceso conspirativo que pugna por desembocar en un golpe de Estado. Su costo sería el destrozo y pisoteo de la democracia. Con su hundimiento se irán las posibilidades de cambio. No podría haber desgracia mayor.


Lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia. Mahatma Gandhi Político y pensador indio (1869-1948)La violencia es miedo de las ideas de los demás y poca fe en las propias”. Antonio Fraguas Forges Humorista español (1942-2018)