Por la paz

Todos debemos comprometernos a trabajar enteramente para que respiremos verdadera paz y conocer el sabor ilimitado de vivir libres, quienes tienen que iniciar esta afable marcha del bienestar planetario, son nuestros líderes: padres de familias, gobiernos, religiosos, maestros, artistas y empresarios. Los líderes tienen que dar ejemplo de honestidad y responsabilidad tenazmente. Nos estamos asfixiando por falta de paz. Hemos adoptado conceptos que están destruyendo nuestro universo. Los niños y adolescentes crecen en un mundo contaminado de hipocresía, avaricia, odio y mentira. La disciplina se ha marchitado en su totalidad, la ética se oculta lentamente así como se oculta el sol de verano. Los valores se han modernizado en usufructo para los máximos representativos de pocos gremios de la sociedad.

Carlos J. Jarquín
[email protected]