Tradiciones con olor a palo santo

RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
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RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.
RITUAL. El particular olor del palo santo acompaña ceremonias religiosas indígenas.

El árbol de palo santo mide alrededor de 18 metros de altura y crece en los bosques amazónicos de Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil. El origen de su uso se remonta a la época precolombina. Los incas lo utilizaban en sus eventos religioso-espirituales, como herramienta para atraer la buena suerte, alejar la negatividad y como medio de comunicación espiritual con los dioses.

En la actualidad, la población indígena todavía lo utiliza en rituales como los matrimonios. La tradición es que la pareja plante un palo santo en ausencia de testigos para unir sus destinos por la eternidad. Asimismo, los curanderos y chamanes andinos y amazónicos lo usan en rituales.

Es muy común encontrar el palo santo en tiendas de productos naturistas y en los mercados como incienso natural, ya que emana olores agradables. Popularmente se cree que su consumo atrae a la suerte, mejora el estado de ánimo y es un energético para renovar espacios y ambientes.

Usos ceremoniales
Los Lengua-Maskoy (pueblo indígena de Paraguay) tienen la creencia de que una fogata hecha con la madera del palo santo evita que los espíritus maléficos se acerquen a las viviendas. Esto, debido a la particular claridad de las llamas que surgen cuando esta madera se enciende. (CM)

El árbol de palo santo mide alrededor de 18 metros de altura y crece en los bosques amazónicos de Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil. El origen de su uso se remonta a la época precolombina. Los incas lo utilizaban en sus eventos religioso-espirituales, como herramienta para atraer la buena suerte, alejar la negatividad y como medio de comunicación espiritual con los dioses.

En la actualidad, la población indígena todavía lo utiliza en rituales como los matrimonios. La tradición es que la pareja plante un palo santo en ausencia de testigos para unir sus destinos por la eternidad. Asimismo, los curanderos y chamanes andinos y amazónicos lo usan en rituales.

Es muy común encontrar el palo santo en tiendas de productos naturistas y en los mercados como incienso natural, ya que emana olores agradables. Popularmente se cree que su consumo atrae a la suerte, mejora el estado de ánimo y es un energético para renovar espacios y ambientes.

Usos ceremoniales
Los Lengua-Maskoy (pueblo indígena de Paraguay) tienen la creencia de que una fogata hecha con la madera del palo santo evita que los espíritus maléficos se acerquen a las viviendas. Esto, debido a la particular claridad de las llamas que surgen cuando esta madera se enciende. (CM)

El árbol de palo santo mide alrededor de 18 metros de altura y crece en los bosques amazónicos de Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil. El origen de su uso se remonta a la época precolombina. Los incas lo utilizaban en sus eventos religioso-espirituales, como herramienta para atraer la buena suerte, alejar la negatividad y como medio de comunicación espiritual con los dioses.

En la actualidad, la población indígena todavía lo utiliza en rituales como los matrimonios. La tradición es que la pareja plante un palo santo en ausencia de testigos para unir sus destinos por la eternidad. Asimismo, los curanderos y chamanes andinos y amazónicos lo usan en rituales.

Es muy común encontrar el palo santo en tiendas de productos naturistas y en los mercados como incienso natural, ya que emana olores agradables. Popularmente se cree que su consumo atrae a la suerte, mejora el estado de ánimo y es un energético para renovar espacios y ambientes.

Usos ceremoniales
Los Lengua-Maskoy (pueblo indígena de Paraguay) tienen la creencia de que una fogata hecha con la madera del palo santo evita que los espíritus maléficos se acerquen a las viviendas. Esto, debido a la particular claridad de las llamas que surgen cuando esta madera se enciende. (CM)

El árbol de palo santo mide alrededor de 18 metros de altura y crece en los bosques amazónicos de Ecuador, Perú, Bolivia y Brasil. El origen de su uso se remonta a la época precolombina. Los incas lo utilizaban en sus eventos religioso-espirituales, como herramienta para atraer la buena suerte, alejar la negatividad y como medio de comunicación espiritual con los dioses.

En la actualidad, la población indígena todavía lo utiliza en rituales como los matrimonios. La tradición es que la pareja plante un palo santo en ausencia de testigos para unir sus destinos por la eternidad. Asimismo, los curanderos y chamanes andinos y amazónicos lo usan en rituales.

Es muy común encontrar el palo santo en tiendas de productos naturistas y en los mercados como incienso natural, ya que emana olores agradables. Popularmente se cree que su consumo atrae a la suerte, mejora el estado de ánimo y es un energético para renovar espacios y ambientes.

Usos ceremoniales
Los Lengua-Maskoy (pueblo indígena de Paraguay) tienen la creencia de que una fogata hecha con la madera del palo santo evita que los espíritus maléficos se acerquen a las viviendas. Esto, debido a la particular claridad de las llamas que surgen cuando esta madera se enciende. (CM)