El presidente de la @CONAIE_Ecuador Jaime Vargas relata lo que considera intimidación de la Policía de Guatemala y la rechaza porque "no somos como cualquier ciudadano ecuatoriano, somos autoridad, presidente de la Conaie, que es como el segundo mandatario del país". pic.twitter.com/3veU0BZ7t7
— LaHistoria (@lahistoriaec) February 16, 2020
El Gobierno de Guatemala expulsó a Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), junto a los dirigentes indígenas Luisa Lozano Quizhpe y Apawki Illapa Castro Vaca.
El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, ordenó la detención de los tres ecuatorianos por «soliviantar los ánimos en el país y hacer trabajo político», informó TN23.
Las autoridades de Migración y Policía Nacional Civil de Guatemala procedieron a su identificación y posterior detención, que habría sido al salir del Mercado Central en la Zona 1, para luego ser expulsados del país por violar leyes migratorias e intromisión en asuntos internos.
En un video, Vargas comenta que la Policía no tiene la capacidad de garantizar los derechos ciudadanos. «No somos como cualquier ciudadano ecuatoriano, o migrante, somos autoridad. Yo soy presidente del Movimiento Indígena del Ecuador, allà decimos el segundo mandatario del país».
La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) emitió un comunicado en el que se menciona que Vargas, Castro y Lozano llegaron a Guatemala con invitación de la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Waqib’Kej para participar en actividades con representantes de pueblos indígenas de varios países.
“La Policía luego de dar seguimiento y en actitud intimidatoria procede a interrogarlos y solicitar documentación, ante lo cual los dirigentes entregan la documentación respectiva que avala su estadía legal y certificada, así como lo boletos con fechas de ingreso y salida”, reza el documento.
Además, se menciona que Vargas dejó en su hospedaje el pasaporte y que sugirieron pedir acompañamiento hasta el hotel donde se encontraban hospedados para verificar la información, e incluso solicitar mayor detalle a migración. “Manteniendo una actitud amenazante los agentes de policía se niegan e insisten en trasladarlos y detenerlos en oficinas de migración”.
Luego de ello, según el comunicado, las autoridades verificaron su estadía legal, se comprobó la situación y se cerró el procedimiento.
