Assange rechaza su extradición a EEUU por un caso 'políticamente motivado'

Julian Assange. Fotop: AFP
Julian Assange. Fotop: AFP

El fundador de la plataforma WikiLeaks, Julian Assange, rechazó hoy su entrega a Estados Unidos con el argumento de que las acusaciones de espionaje y fraude informático en su contra por las revelaciones de su portal digital en 2010, que acarrean hasta 175 años de cárcel, están «políticamente motivadas».

Al inicio en la corte londinense de Woolwich del proceso de extradición, que en su primer tramo durará hasta el viernes, su abogado, Edward Fitzgerald, dijo que la solicitud de EEUU es «un abuso de proceso» que ignora la cláusula en el tratado extraditorio británico-estadounidense que prohíbe las entregas por «delitos políticos».

En una intervención previa, el fiscal James Lewis, en representación de la Justicia de EEUU, negó que las imputaciones contra Assange, de 48 años y que lleva casi diez confinado en el Reino Unido, tengan connotaciones políticas y aseguró que es un asunto de «pura criminalidad».

EEUU reclama al australiano para procesarle por 17 delitos al amparo de la ley de espionaje y uno por la ley de fraude y abuso informático por la difusión en 2010-2011, en colaboración con varios periódicos, de registros militares que revelaron crímenes de guerra en Irak y Afganistán; archivos sobre las detenciones extrajudiciales en la bahía cubana de Guantánamo y cables diplomáticos que expusieron abusos de derechos humanos en todo el mundo.

Lewis explicó que se requiere al activista no por su labor periodística, como argumenta la defensa (negó que sea periodista, aunque tiene el carné), sino por «alentar y ayudar» al exsoldado estadounidense Bradley Manning (ahora Chelsea Manning) a obtener ilegalmente información clasificada de ordenadores oficiales y publicarla después en WikiLeaks.

Alegó que, con la difusión de esos documentos secretos, «puso en peligro» la vida de «fuentes e informantes» citados en ellos, lo que la defensa refuta al apuntar que no ha habido ninguna denuncia a ese respecto.

Fitzgerald alertó a su vez de que la extradición de Assange -presente hoy en la corte, anexa a la cárcel de Belmarsh donde está en prisión preventiva- a petición del Gobierno del presidente de EEUU, Donald Trump, «sentará un precedente» contra el periodismo, al aplicar la ley de espionaje contra la labor informativa.

Sobre la motivación política, recordó que EEUU reabrió el caso en 2017 después de que el Gobierno de Barack Obama decidiera no acusar al periodista por el precedente que sentaría para la libertad de prensa y se refirió al hecho de que su cliente fue espiado a petición de Washington por una empresa española cuando estaba asilado en la embajada de Ecuador en Londres.

El abogado dijo que existen pruebas de que Trump ofreció el indulto a Julian Assange si negaba la implicación de Rusia en una filtración de correos electrónicos en 2016 que perjudicó a su rival política, la demócrata Hillary Clinton.