El exsecretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, concluyó la presentación de su prueba testimonial rindiendo su testimonio propio, que duró aproximadamente 38 minutos.
El exhombre de confianza de Rafael Correa, durante su régimen, calificó como una persecución política al proceso que se sigue en su contra por el delito de cohecho, en el caso Sobornos 2012-2016.
Aseguró que él no tuvo ninguna participación en asuntos de campaña del movimiento PAIS en los años investigados y que el manejo de dineros era realizado por la misma agrupación política. Indicó además que se lo incluyó en este proceso «solo por ser abogado de Correa«.
Sin embargo, para la Fiscalía, la cercanía que tenía Mera con Correa hizo que él sea el encargado de la asesoría jurídica de esta presunta trama de corrupción de sobornos. La institución asegura que el exfuncionario se benefició de 365.000 dólares por estos actos ilícitos, mientras estuvo al frente de la Secretaría Jurídica de la Presidencia, en donde se desempeñó entre los años 2007 y 2017.
En su testimonio, Mera aseguró que Pamela Martínez, exasesora del expresidente Correa, recibió 20 mil dólares mensuales de Equitesa, sin precisar durante qué tiempo.
Además, afirmó que se benefició también de otros 400 mil dólares de Odebrecht y también de 250 mil del Consorcio GLP, estos últimos respaldados, según dijo, con documentos del Servicio de Rentas Internas.
Dijo que a Martínez se la debería investigar penalmente por estos hechos.
La defensa de Mera presentó además cuatro testigos, todos abogados que trabajaron en la Secretaria Jurídica de la Presidencia durante su administración. Varios de ellos confirmaron que el asesor, Pedro Espinoza, también laboró en esa dependencia. Él es señalado como quien llevó los sobres con dinero, de manos de Martínez a Mera.