Albergue San Juan de Dios de Quito recibe a ciudadanos venezolanos

ESPERA. Los usuarios hacen fila a la entrada del Albergue San Juan de Dios a la hora del almuerzo.
ESPERA. Los usuarios hacen fila a la entrada del Albergue San Juan de Dios a la hora del almuerzo.
APOYO. José Carvajal (der) se quedó solo después de que sus compañeros viajaron a Perú. En el albergue conoció a más compatriotas.
APOYO. José Carvajal (der) se quedó solo después de que sus compañeros viajaron a Perú. En el albergue conoció a más compatriotas.
ESPACIO. En el albergue hay capacidad para 300 personas que duermen y comen de forma temporal.
ESPACIO. En el albergue hay capacidad para 300 personas que duermen y comen de forma temporal.
PANORAMA. Jaime Buitrago, director del albergue San Juan de Dios, explica que en los últimos meses ha crecido el número de venezolanos en el lugar.
PANORAMA. Jaime Buitrago, director del albergue San Juan de Dios, explica que en los últimos meses ha crecido el número de venezolanos en el lugar.

A diario, al albergue San Juan de Dios llegan aproximadamente 15 personas. De ellas, al menos seis provienen de Venezuela. Según Jaime Buitrago, director de la casa de ayuda ubicada en las calles Túmbez y Bahía de Caráquez, el número ha ido creciendo de manera progresiva en los últimos meses.

Hace un año, se recibía a 4 o 5 venezolanos al mes. Actualmente, la cifra llegó a “110 de un total de 300 personas” que pueden permanecer en el albergue al día, asegura Buitrago. La mayor parte son personas menores de 45 años, a diferencia de los alojados ecuatorianos que son mayores de 65 años.

La estadía es temporal. Quienes ingresan pueden acceder al servicio de alimentación por 15 días y también reciben ropa.

Ayuda
Los recursos que tiene el albergue se consiguen a través la colaboración de la ciudadanía, por lo que las últimas semanas se inició una campaña de donaciones de prendas de vestir para hombres adultos.

1,2
millones de venezolanos han dejado su país hasta este año.Buitrago comenta que es la ropa lo que más se necesita pues, del total de usuarios, el 96% es masculino y las prendas que más llegan son de mujer. De lunes a domingo, de 08:00 a 18:00, se pueden entregar los donativos directamente en el edificio ubicado en las calles Tumbes Oe6-98 y Bahía de Caráquez.

También se reciben aportes de productos alimenticios, muebles usados en buen estado, colchones, cobijas, utensilios de cocina, productos de aseo, entre otros. “Cuando se acaba su tiempo en el albergue, los muchachos nos piden que les ayudemos con cosas para los cuartos que van a rentar”, dice el hermano de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios y agrega que hay una lista de espera para que todas las personas puedan acceder a la ayuda.

Panorama

40%
de usuarios del albergue San Juan de Dios son venezolanos menores de 45 años“Comí como nunca”, dice José Carvajal, de 29 años, cuando recuerda el día que llegó al albergue. Llevaba ocho días de viaje desde el estado Vargas, en el litoral de Venezuela. Una señora lo vio en la terminal de Quitumbe y lo llevó a la casa de acogida. Desde ahí ha salido a trabajar a diario y a mediodía llega para almorzar. Se encuentra con varios de sus compatriotas, quienes también laboran cerca y completan una mesa de siete puestos en el comedor.

El jueves de esta semana se cumplirá el tiempo que puede quedarse. “Ves las caras de la gente que está aquí y parecen tranquilos pero no, siguen preocupados porque no saben qué pasará mañana”, dice el ciudadano extranjero, quien en su país fue escultor y habla inglés. A su lado, uno de sus compañeros menciona que ese es su último día y, como muchos, aún no ha conseguido trabajo.

EL DATO
Entre enero del 2017 y enero del 2018, ingresaron a Ecuador 350.490 venezolanos. Kevin Rojas, de 25 años, también tiene que partir el jueves y sabe que se irá a Lima (Perú), aunque no tiene el pasaje todavía, en la ciudad peruana lo recibirá un amigo de su natal isla Margarita. Todos reconocen que la situación ha sido muy difícil para ellos. Carvajal cuenta que un hombre con el que se encontró en el bus esa mañana se expresó de muy mala manera contra él y sus compatriotas.

Su pedido es que haya una manera ágil de reportar la xenofobia, al menos en el transporte público. Además, piden más oportunidades de trabajo con remuneración justa y que no se los engañe con billetes falsos.

TOME NOTA
Para comunicarse con el Albergue San Juan de Dios puede llamar al teléfono 2280542 o escribir un email a [email protected] o visitar la página web www.alberguesanjuandedios.ec.Una de las pocas mujeres venezolanas que llegó con su pareja al albergue, Blanca A. comenta que para ella también ha sido muy difícil encontrar oportunidades. Más de una vez que ha estado sentada en plazas o parques se le han acercado para ofrecerle trabajo, la condición es que primero vaya con esa persona a su casa.

En cambio, su novio, quien empezó a cargar paquetes en el mercado central, ha sufrido discriminación y malos tratos de quienes trabajan ahí. “Solo pedimos respeto”, dice la caraqueña, quien también cumple su día 12 en el albergue. (PCV)

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