Marino, o el arte en piedra

Selección. La materia prima es esencial. Por su peso son traídas con maquinaria.
Selección. La materia prima es esencial. Por su peso son traídas con maquinaria.
CUIDADO. El buen trabajo está en los detalles y Segundo consigue eso.
CUIDADO. El buen trabajo está en los detalles y Segundo consigue eso.
Destreza. El trabajo más duro implica el uso del combo y el cincel.
Destreza. El trabajo más duro implica el uso del combo y el cincel.
Pureza. Algunas obras son de cangahua, una roca sedimentaria natural.
Pureza. Algunas obras son de cangahua, una roca sedimentaria natural.
Precisión. El golpe debe ser exacto, pues podría romperse la piedra.
Precisión. El golpe debe ser exacto, pues podría romperse la piedra.
Espíritu. Cada obra tiene su nombre en quichua: ‘Musqui’, que significa ‘sueño’; y ‘Chaupi Cara’, que es ‘medio rostro’.
Espíritu. Cada obra tiene su nombre en quichua: ‘Musqui’, que significa ‘sueño’; y ‘Chaupi Cara’, que es ‘medio rostro’.
Aliados. El combo y la punta son sus materiales básicos.
Aliados. El combo y la punta son sus materiales básicos.

Por GÁREL BENALCÁZAR

Segundo Marino, de 42 años, desde que era un niño sintió el llamado de las piedras. El arte de esculpir le llegó temprano. Recuerda que su papá lo recogía de la escuela, junto con sus hermanos, para luego hacer una larga caminata a la casa de Antonio Negrete, el escultor que le enseñó este oficio a su padre, y que después sería la mejor de las herencias. Todo comenzó como un juego, hasta que Marino terminó con la fuerza suficiente para moldear la dura roca, destreza que comparte con toda su familia. El seleccionar la materia prima es lo más importante -asegura-, porque de eso depende que el trabajo sea perfecto. Su taller, ubicado en Pomasqui (Quito), es ahora el templo donde da vida a las piedras.